Falta de agua agobia a miles de familias porteñas

Pese a que puntualmente pagan por un servicio que no tienen, habitantes de las partes media y alta del puerto padecen por el desabasto del vital líquido por el cual pagan hasta 800 pesos por cada pipa

  · lunes 14 de junio de 2021

Foto: Archivo El Sol de Acapulco

En los últimos meses, el problema del desabasto de agua potable en la ciudad, se agudiza para miles de familias que viven en asentamientos humanos situados en la parte alta y media de Acapulco.

Las autoridades, han justificado, que el desabasto constante del vital líquido, es consecuencia del llamado huachicoleo, el robo a través de tomas clandestinas, y el bajo nivel de agua en el principal sistema de captación que hay en Acapulco, "El Río Papagayo", de dónde se deben de sustraer un total de dos mil 400 litros por segundo, cantidad que no se cumple debido a que se tiene un sistema de bombeo que no funciona en un 100 por ciento.

En Acapulco, se tienen más de 270 mil tomas domiciliarias regularizadas, y la mayoría de estás, no tienen un servicio constante de agua potable, sobre todo aquellas que están instaladas en colonias de la parte alta donde muchas ocasiones, no se tienen una red de distribución concluida para cubrir a una población que rebasa en algunos casos hasta las 10 mil familias.

Doña Eva Suastegui de la colonia Ampliación Los Lirios, es una de las miles de amas de casa, que se ven obligadas hacer milagros en sus casas para poder cubrir las necesidades de su familia ante la constante falta del servicio de agua potable.

En su colonia sitiada en la zona suburbana de Acapulco, al igual que doña Eva, hay más de dos mil familias que sufren del mismo problema, y ante esto para poder cubrir sus necesidades están o ligadas a comprar servicios de pipas particulares en 700 y 800 pesos, aunado a esto, compran grandes tramos de manguera y bombas eléctricas que utilizan para conectarlas a la unidades con la finalidad de bombear el agua hasta grandes pilas de concreto que construyen para almacenar lo más que se pueda por un mes el agua.

"Hacemos gasto económicos muy grandes para poder tener agua, un servicio que el gobierno está obligado a darnos, porque pagamos los recibos que mes con mes manda CAPAMA a las casas donde hay tomas de dónde sólo aire sale.

Un tubo colocado por encima de piedras, de escaleras y pasillos angostos es lo único que a estas familias les queda de lo que hace años sirvió para conectar alguas tomas de agua, hoy es sólo un adorno más en una colonia, donde también se carece de algunos otros servicios públicos fuera del suministro de agua.

Pedro Lagunas Aguilera, de 64 años de edad, es otro de los habitantes de la colonia Ampliación Los Lirios, que sufre también por la falta del servicio de agua potable en su casa.

La familia de don Pedro, por falta de recursos económicos, no puede pagar servicios de pipas particulares, por lo que busca tener el agua tendiendo grandes metros de manguera desde la parte más alta del cerro, donde hay algunos manantiales a punto de secarse.

"Yo no tengo dinero, ya no trabajo, y por eso no compramos pipas, compramos manguera haciendo un gran esfuerzo para buscar el agua desde el cerro, pero los pozos ya se están secando, la situación es critica con el agua", expresó al momento de mostrar sus grandes tambos de plástico con muy poca agua en su interior.

El agua potable es sin lugar a dudas el servicio más elemental para las miles de familias acapulqueñas, sin embargo, es el principal problema por el que hoy en día sufre más la población.

Leonides Loeza Bernardo, aseguró que el desabasto de agua, los obliga a hacer gasto económico muy grandes con bombas, cables y mangueras para poder tener agua en sus casas.

Buscamos el agua en los cerros y la cuidamos lo más que se puede, además la reciclamos para el uso del sanitario porque no todos tienen la posibilidad de pagar servicios de pipas particulares cada mes.

Acapulco, se ha convertido en una ciudad de constantes protestas por la falta de agua potable en las colonias, unidades habitacionales y en comunidades donde también los habitantes sufren por el desabasto del vital líquido.