Chilpancingo vivió una noche triste tras confirmarse el asesinato del alcalde capitalino Alejandro Arcos Catalán.
La situación generó incertidumbre entre los capitalinos, quienes pasadas las 21:00 horas optaron por resguardarse en sus sus hogares.
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Calles desoladas fueron algunas muestras de la incertidumbre y zozobra que generó el asesinato del político perredista.
Grupos de WhatsApp fueron utilizados para informar a padres de familia sobre la suspensión de clases, así como para llamar a los vecinos a no salir si no era necesario.
Vía redes sociales se informó sobre varios rumores relacionadas con la suspensión del servicio público, incluso con protestas de justicia.
Fueron varios los políticos y figuras del ámbito público quienes mostraron en redes sociales su condena contra el asesinato de quien fuera alcalde de Chilpancingo.
Fueron recurrentes los operativos de seguridad y patrullajes en Chilpancingo, todos estos a cargo de la Policía Estatal, Ejército Mexicano y Guardia Nacional.
