Trabajadores del Tribunal de Conciliación y Arbitraje iniciaron un paro con carácter de indefinido y tomaron sus oficinas ubicadas en el interior del edificio Vicente Guerrero de esta capital, con ello demandan tener una homologación salarial al nivel de los trabajadores del Tribunal de Justicia Administrativa y que se incremente la cantidad de personal para poder atender un rezago de más de 13 mil expedientes.

Los quejosos quienes pidieron no revelar sus nombres para evitar las consabidas represalias, reseñaron que en el año 2015 realizaron un movimiento parecido para demandar las mismas cosas, un salario digno, equipamiento adecuado para prestar la atención al usuario y el incremento de personal, con eso lograron compromisos que se establecieron en una minuta sin embargo el estado no cumplió y a la fecha se mantiene las mismas condiciones de trabajo inadecuadas.

Mencionaron que en el Tribunal de Conciliación y Arbitraje se atienden problemas laborales de los 81 municipios, del Congreso estatal, y de todas las dependencias del Gobierno del Estado, lo que genera una carga de trabajo excesiva pues a diferencia de la Junta Local de Conciliación o el Tribunal de Justicia Administrativa, este tribunal no tiene delegaciones regionales y todos los expedientes se deben concentrar en esta oficina.

“Tenemos una plantilla laboral de sólo 80 trabajadores entre los de base, lista de ralla, lo que es insuficiente para toda la carga laboral que existe y por ello es el rezago de más de 13 mil expedientes que están activos”.

Compararon la cantidad de personal con una de las dos Juntas locales de Conciliación y arbitraje que se encuentran en Acapulco, en las que tiene más de 150 empleados para atender Acapulco y la costa Grande, mientras que en el Tribunal con 80 se atiende todo el estado.

En lo que respecta a salarios, establecieron que por citar un ejemplo un actuario del Tribunal de Justicia Administrativa tiene un salario de 12 mil pesos quincenales, cuando en este tribunal el salario de un actuario es de sólo 7 mil 500, siendo que su responsabilidad y desempeño es exactamente el mismo.

“Sabemos que la diferencia es mucha y no se puede arreglar de la noche a la mañana, sin embargo si tiene que haber un compromiso y empezar a tener incrementos”.

Finalmente destacaron que el movimiento pudo haber sido evitado si existiera al menos la voluntad de escucharlos, pues desde el 15 de enero se tenía programado establecer una mesa de trabajo, con autoridades de Finanzas del estado, sin embargo fue cancelada y hasta el día de hoy no se les ha dado fecha de reprogramación.