El gobierno municipal de Tlacotepec determinó cerrar totalmente el acceso a su cabecera municipal como parte de las acciones preventivas que buscan evitar la diseminación de la enfermedad del coronavirus, a este lugar no se permite la entrada de vehículos ni siquiera de transporte público, ni personas externas al pueblo.

De acuerdo con el vocero de la alcaldía Alejandro Pación Arce, las medidas de prevención los obligaron a determinar medidas extremas para proteger a la población, “los vehículos distribuidores de productos solo pueden entrar con una persona que es el conductor si trae acompañante este tendrá que esperarlo en el módulo que se instaló en la entrada del pueblo”.

El módulo se encuentra instalado en el punto conocido como Tres Cruces que se encuentra a más de tres kilómetros de la entrada de la población, y ahí los conductores son revisados para verificar que no tengan gripe, tos seca o fiebre, de tener uno de esos síntomas no podrían entrar al pueblo.

En el caso de personas locales que tengan que salir deben hacerlo de manera cuidadosa en vehículos con pocas personas y ser revisados al momento de regresar, “del pueblo quien quiera salir puede hacerlo, pero para entrar se han establecido mecanismos de seguridad muy rigurosos, para bien de toda la comunidad”.

Resaltó que hasta el momento no se ha tenido casos de personas contagiadas por el virus, ni siquiera sospechosas de portarlo, pero ante la pandemia que se vive en el mundo y acatando las recomendaciones de las autoridades del sector salud la comunidad decidió blindarse.

Adicionalmente al blindaje, también se han distribuido recomendaciones entre los pobladores para que se priorice la higiene para evitar los contagios y se sigan los lineamientos del sector salud como toser o estornudar cubriéndose con la parte interna del codo y no asistir a lugares donde haya aglomeración de personas.

El municipio de Tlacotepec se encuentra ubicados en la sierra de Guerrero y ha sido muchas veces señalado de ser uno de los mayores productores de amapola y marihuana del país, por lo que también ha sido azotado en los últimos años por el fenómeno de la violencia, que a su vez ha generado desplazamientos forzados y proliferación de grupos de civiles armados que hacen funciones de policías comunitarias.