Sin la presencia de familiares ni amigos y 11 días después de su muerte, este lunes 8 de abril fue sepultada en un panteón de Iguala la señora Ana Rosa Díaz Aguilar, la mujer que fue linchada en Taxco tras ser acusada de la muerte de Camila, una pequeña de ocho años.
En el panteón no hubo llanto ni mucho menos gritos con exigencias de justicia, tampoco colectivos de mujeres que ofrecieran respaldo para ella, en el lugar solamente había una máquina retroexcavadora que fue la encargada de hacer la cepa para depositar el cuerpo de Ana Rosa y después la misma maquinaria lanzo la tierra para cubrir el féretro.
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Elementos de la Policía Estatal que dieron acompañamiento a la funeraria para hacer la inhumación fueron los encargados de sostener las cuerdas para que el féretro descendiera al lugar que será el sitio de eterno descanso para esta mujer.
Secuestro y asesinato de la niña Camila en Taxco
El 27 de marzo la niña Camila entró al domicilio de Ana Rosa supuestamente a jugar con su hija de 8 años, la niña no volvió a salir de ahí, una hora después desde el teléfono de la niña llamaron a su madre para exigirle un rescate de 250 mil pesos o de lo contrario la asesinarían.
Gracias a cámaras de seguridad se logró identificar a Ana Rosa y a su pareja, un taxista de nombre José, cuando sacaron bultos en los que hicieron parecer que llevaban ropa pero en realidad escondida entre ellos llevaban el cuerpo de la menor Camila, que fue localizado al día siguiente tirado en un paraje cercano a la carretera Taxco-Cuernavaca.
Una vez que trascendió en redes sociales el contenido de estos videos, alrededor del domicilio de Ana Laura se congregaron cientos de personas que reclamaban a las autoridades entrar para detenerlos, pero ante la apatía de las policías, decidieron allanar la casa sacar a la mujer y golpearla hasta morir, así mismo sacaron de ese lugar a dos de los hijos de Ana Rosa que también los golpearon de forma brutal pero lograron salvar la vida.
Por el riesgo que existía de que el sepelio fuera atacado y se generará más violencia, los familiares decidieron no realizar las exequias correspondientes y únicamente contrataron a una funeraria para que se encargaran de todo lo relacionado a la inhumación además de que los dos hijos mayores de Ana Rosa se encuentran presos sujetos a proceso por su posible implicación en el homicidio de la niña Camila.