La misión la ha incumplido. La designación por compromisos políticos ha llevado a la Semaren a desatender la vasta problemática en materia de medio ambiente en los 81 municipios de la entidad, donde la contaminación está a la orden del día, lo que provoca que Guerrero enfrente graves problemas.

La crisis ambiental se ha extendido a lo largo del estado. En los principales municipios de la entidad, se enfrentan casos por descargas de aguas residuales, tiraderos clandestinos, tala inmoderada de árboles, entre otros que, se suman al deterioro del equipo que se ha adquirido para medir la contaminación por quema de desechos sólidos e incendios forestales.

Desde el 2005 durante el último año de gobierno de René Juárez Cisneros fue creada bajo acuerdo político con el Partido Verde Ecologista de México la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semaren), la cual a la fecha es considerada como improductiva en temas de manejo ambiental.

En la actualidad, Guerrero enfrenta graves problemas en la materia y no se cuenta con equipo especial para medir los niveles de contaminación que se enfrentan en Acapulco, Chilpancingo, Iguala, Taxco de Alarcón, Atoyac de Álvarez, entre otros municipios donde se han registrado incendios que han afectado a la población, quema de desechos y vertimientos de aguas residuales al mar, ríos y arroyos.

Dicha dependencia que ha dejado atrás las acciones para la que fue creada como el manejo de temas forestales, la medición de la calidad del aire y el combate a puntos que son considerados como contaminantes para la entidad, ha servido en los últimos años como refugio y trampolín político para quienes han tenido en sus manos la dirigencia del Partido Verde Ecologista de México en Guerrero.

La Semaren, representa en materia de presupuesto un gasto económico superior a los 25 millones de pesos anuales para el gobierno de Guerrero, sin embargo, la dependencia es considerada un elefante blanco, porque fuera de desarrollar programas y proyectos que estén encaminados a combatir el problema de la contaminación, los funcionarios que han estado al frente de dicha dependencia, solo han buscado su proyección política logrando cargos como regidores, diputados locales y federales, además de dirigentes del mismo partido por el cual fue creada.

En el periodo 2005-2011 con el ex gobernador Zeferino Torreblanca Galindo la Semaren obtuvo su mayor productividad como dependencia de gobierno, con la creación de cuatro rellenos sanitarios entre estos el de Acapulco y Chilpancingo, la instalación de tres estaciones de monitoreo de la calidad del aire, los cuales hoy en día cuando se sufre de una contingencia ambiental por los incendios forestales, se encuentran en total abandono, debido al retroceso que ha tenido la citada secretaria.

Dicho periodo fungió como secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semaren), el actual director de la Administradora de Playas del gobierno del estado Sabas Arturo de la Rosa Camacho, posteriormente el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero refrendo el compromiso con el Partido Verde Ecologista de México para que este instituto político mantuviera en su poder cuatro años más la dependencia que fue creada en 2005.

Entre los militantes del Partido Verde Ecologista de México que han dejado a un lado las acciones de combate al problema de contaminación en el estado, para obtener cargos políticos a través de la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semaren), se encuentran la actual dirigente estatal del PVEM y ex diputada local Karen Castrejón Trujillo quien también fue considerada como aspirante a la primera sindicatura de Acapulco en la planilla del ex candidato a presidente por el PRI, Ricardo Taja Ramírez.

El ex regidor en Acapulco, Allan Ramírez Hernández quien estuvo al frente de la Semaren sin ningún resultado en materia ecológica y pasó desapercibido debido a que ningún procedimiento legal inicio por problemas de tiraderos clandestinos en municipios como Acapulco, por descargas de aguas residuales, y en Chilpancingo donde la basura fue parte de la destitución de Marco Antonio Leyva Mena como alcalde.

Asimismo, el ex diputado federal por el partido Verde Ecologista Arturo Álvarez Angli y ex dirigente en Guerrero de este instituto político quien el pasado mes de abril el gobernador Héctor Astudillo Flores le tomó protesta como nuevo titular de la Secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, por lo que con este son tres los militantes del PVEM, los que han tenido beneficios políticos a través de la Semaren.

La misión de la Semaren, es buscar la integración entre los elementos sociales, económicos y naturales, que permitan asegurar el óptimo aprovechamiento, de conservación y protección de los recursos naturales del Estado, conformando así una política ambiental integral y participativa para un desarrollo sustentable, lo cual en ningún municipio se ha concretado dicha acción debido a que la dependencia es utilizada con fines políticos.

Guerrero en estos momentos vive la peor crisis de contaminación ambiental así como la pérdida de más de 17 mil hectáreas a causa de los incendios forestales, además de la contaminación de ríos, bahía y de lagunas por las descargas de aguas residuales que de forma irregular tienen fraccionamientos, hoteles, condominios y centros comerciales, sin embargo, estos problemas sociales que ponen en riesgo la salud de millones de guerrerenses no han sido resueltos, debido a que la Semaren a la que corresponde actuar de manera legal de acuerdo a la ley no lo ha hecho dejando atrás su responsabilidad como institución de gobierno.

En Acapulco, uno de los municipios que enfrenta la problemática, resaltan los vertimientos de aguas negras a la bahía, quema de basura en la zona diamante donde las autoridades de los tres órdenes de gobierno, no cuentan con equipo para medir los niveles de contaminación en el aire, también las descargas que colonos hacen irresponsablemente a los canales pluviales que han sido descubiertas, y algunas clausuradas por el municipio.

No obstante, la problemática prevalece, las sanciones que deben aplicarse por parte de las autoridades ambientales, no llegan, y una de las zonas donde se tienen detectadas conexiones de drenajes que van a parar al mar, se encuentran en la zona Diamante del puerto, donde grandes consorcios y condominios, viertes sin tratar los desechos al mar lo que ha generado graves problemas de contaminación en Acapulco.