Al menos una docena de pinos adultos que se encuentran sembrados en el camellón que divide el boulevard René Juárez, frente al Museo La Avispa, se secaron sin ninguna razón aparente, junto a ellos se encuentran más árboles que podrían correr la misma suerte si la autoridad no busca el origen del problema.
Se nota que los árboles a pesar de estar muertos conservan su follaje seco, esto podría tratarse de una plaga de un gusano barrenador de suelo, que ataca directamente a la raíz, también podría tratarse de falta de agua y el exceso de calor, que se tuvo en los meses recientes y en esta temporada el fenómeno es más notorio porque los árboles vivos se pusieron más verdes y contrastan con los secos que ya tiene meses en este estado.
“En realidad para poder definir una causa se tendría que hacer un estudio detallado de los árboles, conocer su expediente de cada uno, es decir, cuándo fueron sembrados, qué tipo de fertilización han recibido, qué tipo de tierra se colocó, si están colocados directamente en la tierra o tienen alguna especie de maceta enterrada, y muchos otros detalles que pueden ayudarnos a saber qué pasó a los árboles".