El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, se reunió en Acapulco con pobladores de Cruz Grande quien el pasado jueves 20 de agosto impidieron la puesta en marcha del Centro de Salud con Servicios Ampliados de Florencio Villarreal, afectando la atención hospitalaria que se brinda a los ciudadanos de la Costa Chica.
En sus oficinas de la Promotora Turística ubicadas en la zona Diamante del puerto, el mandatario estatal, recibió a los inconformes, quienes aseguraron que, gestionaron está obra desde hace diez años e insistieron que, en esa zona se requiere de un hospital y no un centro de salud.
"En un marco de respeto, hoy sostuve reuniones de trabajo con habitantes del municipio de Florencio Villarreal, en primera instancia con regidores y posteriormente con el comité ciudadano que impulsó la construcción de la Unidad de Salud de Cruz Grande hace 10 años", escribió, Astudillo Flores en su cuenta de Twitter.
El mandatario estatal, les explicó que, al mantener cerrada la unidad de salud, se está afectando a la población de varios municipios de la Costa Chica, quienes no han podido recibir atención médica debido a la protesta de la semana pasada.
"Comparto su aspiración de contar con mejores instalaciones pero también es importante valorar lo que hoy se tiene. Poner en marcha las instalaciones de esta unidad y continuar con las gestiones para lograr su ampliación es uno de los acuerdos a los que llegamos", aseguró, Héctor Astudillo.
Cabe mencionar que, el pasado jueves 20 de agosto, este grupo de personas protestaron y tomaron la entrada principal del centro de salud, algunos ingresaron por la fuerza al lugar, e impidieron la entrada al gobernador, Héctor Astudillo Flores, quien había organizado la inauguración y no se llevó a cabo.
Asimismo, en algunas fotografías se dio a conocer que algunos de los manifestantes, fueron reconocidos como Siervos de la Nación, quienes trabajan en la organización de los programas sociales del gobierno de México en la Costa Chica.