Mientras día con día aumenta el bajo nivel de las presas como consecuencia de la escasez de lluvias y altas temperaturas, ciudadanos de los principales municipios de Guerrero comienzan a padecer por la falta del importante líquido en sus viviendas y por los bloqueos que se realizan para demandar el suministro.
En Acapulco y Chilpancingo, los dos principales municipios de la entidad, el primero generador de la mayor parte de los recursos que se tienen en el estado y el segundo, donde se instalan los tres poderes de gobierno, han empezado a padecer por la obstrucción de vialidades.
En Acapulco, vecinos de las partes altas como la 20 de Noviembre, Morelos, Primero de Mayo, entre otras, así como de partes bajas, están padeciendo la falta de suministro de agua por parte de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (Capama).
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De acuerdo con el reclamo de los vecinos, en el caso del puerto, en algunas colonias de las partes media y alta, llevan más de 20 días que no se cuenta con el tandeo del líquido y, en varios casos, no se cuenta con accesos que permitan el ingreso de una pipa para abastecerse.
En contraparte, los usuarios de Capama, se quejan porque reciben dos veces en promedio el tandeo, pero Capama cobra el recibo como si hubieran recibido al líquido todos los días.
En Acapulco, como en Chilpancingo, las autoridades han señalado que la escasez del agua tiene que ver con los niveles alarmantes de este recursos en ríos y pozos debido a la temporada de estiaje, lo que ha provocado que el liquido no llegue a los hogares.
En la capital, solo el 50 por ciento de pobladores tiene acceso a la red de agua potable, la cual es alimentada por tres sistemas de bombeo, Omiltemi, Acahuizotla y Mochitlán, solo dos están operando y en números alarmantes, por lo que se optó por distribuir agua en pipas.
La población en general tiene que desembolsar entre 450 y 850 pesos para adquirir agua en pipa, al igual que cientos de comercios, hoteles y restauranteros, que en el caso de Acapulco, reactivan la economía local.
A esto se suma, que algunas instituciones como la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, sigan pronosticando cero lluvias en el territorio guerrerense y solamente cielo nublado.