La demostración de fuerza, destreza y arrojo de los hombres de Chilpancingo quedó demostrada una vez más en la celebración del tradicional Porrazo del Tigre, en el que un representante por barrio enfrenta a sus adversarios en una especie de lucha grecorromana y gana quien logra poner de espaldas en el suelo al oponente.
Este año el triunfo fue para el Barrio de San Antonio, y por reglas del concurso, la identidad del tigre ganador no se da a conocer, únicamente se le atribuye el triunfo al barrio que representa.
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La batalla final la libraron el representante del Barrio de San Antonio contra el de Tequicorral, quienes por varios minutos se mantuvieron trensados de las manos, haciendo fuerza para tratar de ganar un poco de ventaja, y a pesar de que San Antonio se notaba menos corpulento, al final logró tomar el pie de su adversario y derribarlo.
El Porrazo del Tigre es una de las dos competencias en las que cada año en el marco de la Feria de Navidad y Año Nuevo, se involucran los barrios tradicionales de Chilpancingo, donde la otra es el Certamen Flor de Nochebuena, que busca designar representante femenina de belleza y conocimientos sobre la cultura local.
Mientras que en el Porrazo del Tigre se designa al ganador por fuerza, arrojo e inteligencia, que son cualidades necesarias para poder derribar al oponente.
El Porrazo del Tigre se lleva a cabo al concluir el tradicional Paseo de Pendón, y en esta ocasión se hizo con una plaza completamente llena, lo que indica que al menos 7 mil personas acudieron a presenciar este espectáculo.
Al final del "porrazo" y una vez que se premió al representante de San Antonio, la fiesta para los chilpancingueños continuó con un jaripeo y la presentación del artista oriundo de La Montaña de Guerrero, Erasmo Catarino.