El retiro de más de la mitad de los 10 mil efectivos de la Guardia Nacional que destinó el presidente de México Andrés Manuel López Obrador para garantizar la seguridad de los lugareños y turistas tras el paso del huracán Otis, es aprovechado por grupos delictivos que se disputan la plaza, para cometer diversos delitos, principalmente los homicidios dolosos.
La Fiscalía General del Estado de Guerrero inició dos carpetas de investigación por los homicidios dolosos y con saña de siete personas localizadas en dos puntos de Acapulco.
Lea también: Hallan cuatro cadáveres en Ciudad Renacimiento
Pese a que en la ciudad se construyen 21 cuarteles con una inversión de mil 500 millones de pesos para establecer a los integrantes de la mencionada corporación de seguridad que, se retiró a más de la mitad de los 10 mil elementos destinados para vigilar la ciudad y, a pesar de su presencia persisten los delitos atribuidos a la delincuencia organizada.
En lo que va de la semana en Acapulco han sido asesinadas más de 15 personas, uno de ellos un efectivo del Ejército Mexicano con funciones de Policía Ministerial que en su día libre departía en el bar City en plena zona turística del puerto.
El pasado miércoles, cuatro personas fueron asesinadas a balazos en distintos puntos de Acapulco, dos de ellos trabajadores del volante que fueron sorprendidos por sus homicidas.
Este jueves por la mañana, siete personas fueron encontradas sin vida en dos puntos de la ciudad que es vigilada con operativos permanentes por parte de los elementos de la Guardia Nacional en coordinación con el Ejército, policías estatales, ministeriales, preventivos y turísticos las 24 horas del día.
En declaraciones hechas el miércoles, el inspector de la Guardia Nacional Julio César Hernández, reveló que de los 10 mil miembros de la corporación que llegaron después del 24 de octubre del 2024, en el puerto solo de tiene un despliegue de cuatro mil 400 elementos.
“En Acapulco tenemos desplegados cuatro mil 400, ya disminuyó el número, pero vamos a estar trabajando en todos los sectores, desde operativos para evitar accidentes, la disminución, apoyos en el rubro de tránsito para evitar los excesos de velocidad, en retenes en todo”, aseguró.
No obstante, a pesar del trabajo de las autoridades en materia de seguridad, en la ciudad se registra un repunte de violencia a partir de que el pasado martes autoridades federales dieron a conocer la disminución de homicidios dolosos.
En la colonia Ciudad Renacimiento, cuatro personas, una de ellas mujer, fueron encontradas decapitadas y desmembradas esparcidos en la carpeta asfáltica de la calle Cuauhtémoc junto a la secundaria número 9 en el circuito interior de este núcleo poblacional.
Personal de la Guardia Nacional llegó como primer respondiente y se acordonó la zona. En el sitio a las 06:00 de la mañana fueron encontradas también cartulinas con mensajes atribuidos a la delincuencia organizada, así como tres hieleras que contenían restos de las víctimas.
Las fuerzas de seguridad que llegaron a la zona, también localizaron una camioneta tipo Urvan, de la que no se precisó si era del servicio público que estaba calcinada.
Casi cuatro horas después, a las 09:30, se dio aviso a las autoridades de una camioneta abandonadas tipo Frontier, de color gris y de la marca Nissan que en la batea tenía los restos humanos de otras tres víctimas.
La unidad motriz fue abandonada a unos 50 metros de la entrada de la colonia Los Periodistas y del fraccionamiento militar donde las 24 horas se tiene presencia de soldados que vigilan la zona.
El vehículo tenía propaganda política en el medallón del candidato a presidente municipal de Coyuca de Benítez, José Alfredo Cabrera de la alianza PRI, PAN y PRD.
Personal de Servicios Periciales realizó los trabajos correspondientes en ambos hechos de violencia y trasladó los restos humanos que encontraron en ambos casos a sus instalaciones para la práctica de la necropsia de ley correspondiente. Los siete cadáveres fueron ingresados al anfiteatro de la ciudad en calidad de no identificados.
En lo que va del año, la delincuencia organizada mantiene bajo azote a la ciudad y pese a los recorridos preventivos, el factor sorpresa de los grupos delictivos impacta en el sector empresarial y del transporte con extorsiones.
A principios de enero, trabajadores del volante fueron amenazados y a mediados del citado mes, suspendieron en un 80 por ciento el servicio que impactó a la ciudadanía y los empresarios reportaron pérdidas millonarias.
La crisis de inseguridad propició que elementos de la Guardia Nacional se mantengan en las unidades del transporte público, principalmente en camiones urbanos debido a que quema de cuatro camiones y taxis en distintos puntos de la ciudad.
Autoridades del gobierno de Guerrero, informaron que ante los hechos de violencia se mantiene el reforzamiento de seguridad en Acapulco donde participa personal de la Policía Estatal y las Unidades Especiales de la Secretaría de Seguridad Pública.
En un comunicado dieron a conocer que “han reforzado sus operativos conjuntos y coordinados con autoridades civiles y militares en distintas zonas y polígonos prioritarios”.