Con la mayoría de escuelas ya sin clases y con la burocracia en vacaciones, este martes la actividad comercial y social en la capital se reactivó después de cuatro días de zozobra a causa de los últimos hechos de violencia.
Se realizó un recorrido del norte al sur de la ciudad, donde se percató la presencia de más unidades del transporte público, que en días pasados habían mantenido reducido el servicio hasta en un 30 por ciento.
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Las únicas bases de urvans que no reactivaron sus actividades, fueron de las rutas hacia Quechultenango, Mochitlán y Colotlipa, el llamado Circuito Azul; mientras que solo se observaron brindando el servicio a las combis de Petaquillas.
Inmuebles como el Palacio de Gobierno, fue reabierto para el ingreso de algunos trabajadores, aunque ya previamente se había informado que este miércoles 12 iniciarían las vacaciones para los servidores públicos.
En el centro, los locales que habían cerrado en días pasados, volvieron a abrir sus puertas y se colocaron los habituales puestos en calles del primer cuadro de la ciudad, así como en el zócalo, donde se otorgó un permiso para que comerciantes pudieran vender su mercancía.
En el mercado la actividad comercial se reactivó con normalidad, a la par que se realizaban recorridos de vigilancia a cargo de personal de la Policía Estatal.
Durante la jornada del martes, el titular de la Secretaría General de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez informó que se reforzaría la seguridad en la capital, en coordinación con el Ejército y la Marina, y pidió confianza a la ciudadanía para regresar a las actividades con normalidad.
