Hoteleros y restauranteros de Ixtapa-Zihuatanejo consideraron que la reducción de aforo de atención para estas vacaciones de verano, del 80 al 60 por ciento, afecta en materia económica pero es necesario para cuidar la salud de turistas y habitantes.
El gobierno del estado tomó esa decisión para evitar concentraciones masivas que eleven los contagios de Covid-19, pero era esta época muy esperada para prestadores de servicios turísticos, sobre todo porque esperaban recuperarse de las afectaciones económicas que arrastran desde que comenzó la pandemia.
El Presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de Zihuatanejo, Rogelio Lozano Calderón, dijo que las decisiones para el manejo de la pandemia en la entidad y el municipio han sido acertadas, por lo tanto, esta medida también la van a seguir, con la esperanza de que en un futuro regresen las ocupaciones del 100 por ciento.
Por su parte la Presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac) en Guerrero, Rebeca Farías Salazar, informó que hasta el momento ninguna persona se ha contagiado en un restaurante, resultado de seguir los protocolos sanitarios al pie de la letra, y aunque reducir la capacidad de atención merma en sus ingresos, van aceptar las medidas.
Los hoteleros y restauranteros de Ixtapa-Zihuatanejo tienen la responsabilidad de no bajar la guardia y reforzar las medidas sanitarias contra el Covid-19, no sólo cumplir ellos, sino hacer que los visitantes también lo hagan, de manera que haya saldo blanco estas vacaciones de verano.
Al cierre de esta edición, los representantes turísticos descartaron contagios entre trabajadores de hoteles y restaurantes.