La escasez de agua potable por la que atraviesan miles de colonos y que los ha orillado a realizar bloqueos carreteros, toma de oficinas de CAPAMA y protestas en el ayuntamiento porteño que encabeza Adela Román Ocampo, generó la primera queja en el 2021 ante la delegación de la Comisión de Derechos Humanos de Guerrero por el deficiente servicio.
La denuncia ciudadana fue presentada en contra del ex director del organismo Ramón Aysa Neme, quien, con su llegada a la paramunicipal, en sustitución de Leonel Galindo González, complicó el de por sí mermado servicio del vital líquido a las colonias de la parte alta de la ciudad.
Antes del arribo de Aysa Neme, vecinos de las partes altas de la ciudad como la colonia 20 de noviembre, recibían agua por lo menos una vez por semana, sin embargo, en el periodo que le tocó administrar el organismo municipal, el tandeo se extendió en más de trece días.
Leonel Galindo, fue destituido el 14 de julio junto con la directora de ecología municipal, Guadalupe Rivas Pérez, por minimizar una descarga de aguas negras en la playa Icacos de Acapulco que fue expuesta a nivel internacional un 25 de junio. El mismo 14 de junio la Conagua interpuso una denuncia penal por el delito de daño ambiental en contra de CAPAMA ante la Fiscalía General de la República.
El pasado 3 de febrero, El Sol de Acapulco publicó información relacionada con la escasez del servicio que padecen miles de habitantes de por lo menos 200 colonias del anfiteatro, zona Poniente y suburbana de la ciudad porque adunado a la deficiencia en el tandeo, no cuentan con tuberías para que se les dote del servicio.
La delegada de la Comisión de Derechos Humanos en Acapulco, Fanny Ruth Lara Figueroa, informó que en el 2020, no se presentaron quejas en contra de CAPAMA y sus directivos, situación que sí se presentó en lo que va del presente año, por lo que ya registran la primera denuncia.
En el puerto, se han realizado más de una docena de protestas en lo que va del 2021 que han sido bloqueos en la carretera federal México-Acapulco, con dirección a las Cruces, otras se han realizado en la avenida Adolfo Ruiz Cortines, algunas más han sido toma de la dirección de CAPAMA ubicadas en el zócalo y las protestas en el palacio municipal en demanda del líquido.
Tan solo el lunes se registraron dos manifestaciones por falta del vital líquido y denunciaron que se han visto obligados a comprar pipas con agua en costos que van de 500 a 800 pesos.
Derechos Humanos reportó que del 2011 al 2021, es decir en diez años, el organismo que preside en Acapulco ha recibido un total de 56 quejas por diversos derechos violados, entre los que se incluye el derecho a la legalidad relacionado con el cobro de contribuciones, impuestos, sanciones, entre otros.
Precisa que en esta década, se han emitido dos recomendaciones en contra del organismo operador del agua, se han realizado 8 opiniones y propuestas, tres casos han sido de desistimientos, en siete han tenido acuerdos por resolución y otras están en trámite.
El principal argumento de las autoridades municipales del organismo, son las fugas y afectaciones que se presentan en las añejas tuberías que, para cambiarlas en su totalidad requieren de 5 mil millones de pesos que detalla el proyecto presentado a la federación.