Al menos mil árboles se han secado en diversas partes de la ciudad debido a la presencia de una plaga de gusano barrenador, que los ataca desde la raíz y se come el corazón de la planta, reveló el hasta ayer director de Ecología, Sergio Santana Eutimio.
El ahora ex funcionario destacó que en varias ocasiones han pedido apoyo a la Comisión Nacional Forestal, para tratar de resolver el problema de plaga que ha afectado a árboles de la capital, y la dependencia federal les ha regalado químicos para inyectarlo a los árboles que tienen el problema.
Sin embargo, estableció que la mayoría de los árboles se seca y tiene que ser retirados y en algunos casos sustituidos.
Un caso reciente fue en el andador Zapata, en pleno centro de la ciudad, donde un árbol de los conocidos como “lluvia de oro”, simplemente empezó a secarse y tuvo que ser quitado, y se colocó otro de la misma especie.
Mencionó que no hay un registro específico de los árboles que se han secado, sin embargo, se ha detectado que es un gusano que se come el interior del árbol el que los está dañando.
“Es difícil detectar dónde está actuando el gusano, porque el árbol no se nota afectado porque sus hojas permanecen verdes hasta que el ejemplar muere y en pocos días tira todo el follaje».