El primer informe que rendirá este primero de septiembre el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, tendrá muchos pendientes, entre estos el tema de la violencia, el desempleo y la ausencia de obras de impacto, coincidieron dirigentes del PRI, PRD y PAN, quienes reprocharon que, en el caso de Guerrero, no ha recibido el trato que merece.
En primer término, el presidente del Comité Estatal del PRI, Esteban Albarrán Mendoza, refirió que la rendición de cuentas que hará el presidente al pueblo mexicano, habrá grandes pendientes y pocos resultados a un año distancia de haber asumido el poder.
Precisó que, en el caso de este estado suriano, sigue sin verse resultados en el tema de la inseguridad, pero también otro problema que afecto a los campesinos, fue el rotundo fracaso en la entrega del fertilizante gratuito, pues no se entregó a más de 70 mil agricultores.
Mientras que el dirigente del Partido Acción Nacional (PAN) en Guerrero, Eloy Salmerón Díaz, coincidió que, en este primer año no se ha visto avance alguno en los grandes problemas del país, por el contrario, hay cada vez más inconformidad por las malas decisiones que se han tomado desde palacio nacional.
A esto hay que añadir, que, a pesar de la creación de la Guardia Nacional, el problema de la violencia sigue aumentando, como es el caso de Guerrero, en donde, además, no hay apoyos para que pueda salir de la marginación y la pobreza.
Finalmente, el dirigente de Partido de la Revolución Democrática (PRD), Wulfrano Salgado Romero, coincidió que los compromisos de campaña que hizo el presidente López Obrador, no los ha cumplido y siguen a la espera de la obra pública de impacto, porque hasta ahora solo se fomenta en el discurso el tema de los recortes.