Ícono de la belleza en los años 50’s, la diva de Hollywood, Marilyn Monroe, visitó la ciudad colonial de Taxco de Alarcón en tres ocasiones, en las cuales la rubia actriz gustaba caminar por las calles y la música mexicana.
De acuerdo con un documento de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) dirigido al FBI, el 27 de febrero de 1962 fue la fecha en la que Monroe estuvo en Taxco de manera oficial.
Aunque fue borrado el nombre del acompañante, se tuvo conocimiento que su primera visita lo hizo junto con John F. Kennedy y se hospedó en la suite 12 del antiguo hotel La Borda.
Taxco fue su lugar consentido donde se enamoró en su primera visita que hizo en 1962 y de ahí regresó en dos ocasiones más para comprar joyería de plata, artesanías, ropa, muebles, hizo amigos y fue un lugar de relajamiento.
El historiador e investigador Juan de Dios Labra relató que el hotel La Borda aún conserva la habitación en la que se quedó la actriz en más de dos ocasiones, donde se tiene vista a la ciudad colonial y a la iglesia de Santa Prisca.
Tras su primer viaje a Taxco, Marilyn Monroe regresó dos veces más en "top secret", donde le diseñaron ropa exclusiva bordada.
Alejandro Villarejo, coordinador general del Grupo Taxco Hotel, relató que la suite en la que se hospedó en el hotel La Borda, aún existe, "no se ha cambiado el número de la habitación, sigue igual y tiene una vista espectacular hacia Taxco, por eso le gustaba mucho".
En el pasillo principal, cerca de la recepción, para llegar a la habitación 12 se encuentra la portada de una revista "Gente" con la fotografía de Monroe a sus 47 años y la inolvidable visita a México.
Enmarcadas con aluminio se encuentran las páginas más destacadas de esa revista, donde se relata el viaje a México de la actriz, y parte de su visita a Taxco.
También en la habitación hay una fotografía publicitaria que la hizo aún más famosa donde está Marilyn y el metro en una de las calles de Nueva York, en la avenida Lexington.
La actriz también estuvo en el hotel Misión, donde sólo visitó el mural del arquitecto mexicano Juan O´Gorman, quien retrató la historia de Cuauhtémoc, además de que acudió a la iglesia de Santa Prisca.
Alejandro Villarejo, recordó que la actriz cuando volvió a Taxco lo hizo a invitación del diseñador y arqueólogo William Spratling, quien se le considera el padre de la joyería en México y es reconocido por sus creaciones artísticas en plata.
William Spratling, quien estaba avecindado en Taxco, creó diseños exclusivos para Marilyn Monroe.
Según lo descrito, Marilyn llegó buscando en este lugar joyería, muebles y el folklore de la región.
La artista de los años 50 también hizo amistad aquí con la familia Sullyvan, que era dueña de la ex Hacienda del Chorrillo y que se dedicaba a la extracción de metales.
"Aunque no está documentado, sí existe bajo la tradición oral que Marilyn Monroe no sólo vino una vez sino varias veces a Taxco a raíz de la amistad que hizo con la familia Sullyvan", dijo.
Mencionó que la primera vez que vino a este lugar la protagonista de la película "Los caballeros las prefieren rubias" se quedó un fin de semana y con un político estadounidense, posteriormente su visita fue sola y se quedaba por periodos de una semana.
Aquí, agregó, la conocían como "La Gringa Americana" y "La Gringa Bonita", y le gustaba platicar con la gente.
"Ella (Marilyn) era más de convivir con el pueblo y le gustaba caminar por las calles de Taxco. Comía lo que le dieran, como el mole de pétalos de rosa, el pozole, hasta barbacoa de chivo y las carnitas. A ella le gustaba comer lo que le dieran", relató Villarejo.
A su vez, el historiador e investigador Juan de Dios Labra relató que durante la estancia de la ganadora de un Globo de Oro por la cinta "Some like it hot", en esta ciudad colonial, el 27 de febrero de 1962, fue un fin de semana de fiesta y alegría.
Recordó que en el balcón de la habitación número 12 que ocupó en el céntrico hotel La Borda, Marilyn recibió serenata con mariachi y trío, y le cantaron más de cinco temas. En su poco español ella aclaró que no era su cumpleaños.
Pero ante la sorpresa que le dieron y la bienvenida, pidió que la complacieran con la canción de "Guadalajara" con mariachi, además de "Cielito lindo".
Labra afirmó que ella comentó que "Taxco era el lugar más bonito del mundo".
Rememoró que se reunió y se tomó fotos con niños de las escuelas "Niño Artillero" y "Juan Ruiz de Alarcón", quienes le llevaron regalos, flores y la artista los recibió con mucho afecto.
También cuando regresó en una de sus dos segundas visitas, antes de fallecer, le presentaron a la rubia al diseñador de moda taxqueño y masajistas, Panchito, quien la conquistó con un vestido bordado.
“Le presentaron a este señor, fue a visitarlo y le gusto lo que hacía, porque le hacía vestidos a María Félix y a Frida Kahlo, fue en su visita en 1962 y de ahí vino dos veces más después de su primera visita que fue con Kennedy”, precisó el cronista de Taxco.