Maestros y padres de familia del Colegio de Bachilleres en la localidad de El Ocotito, pararon labores y tomaron el plantel para denunciar violencia laboral hacia tres maestras.
El primer caso es el de la maestra Azucena Jiménez, quien recientemente solicitó que le fueran asignadas horas, que un maestro dejó disponibles tras su fallecimiento.
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Sin embargo, estas horas se le asignaron a otro maestro, con menor antigüedad que Azucena Jiménez, y todo ello amparado por el director del plantel, Abad Liborio Saligan.
Los padres de familia señalaron que desconocen los motivos por los que en el plantel, no se reconoce el labor de las maestras, ya que en otros dos casos, a dos maestras fueron retiradas del grupo y asignadas a espacios administrativos con menores sueldos.
Tras la toma del plantel, unos 430 alumnos se quedaron sin clases de manera indefinida. Mientras, que existe la advertencia del personal que apoya a las maestras, a bloquear este martes la Autopista del Sol en caso de no haber respuesta a sus demandas.
En una conferencia de prensa a las afueras del instituto, los inconformes pidieron la intervención de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, así como de la dirigencia del Sindicato Único de Trabajadores del Colegio de Bachilleres (Sutcobach).