Agricultores que siembran en las márgenes del vaso de la presa Cerrito Rico denunciaron que fueron excluidos de los apoyos que otorgó el gobierno federal tras el paso del huracán John a pesar de que sus cultivos de maíz, frijol, jitomate y otras hortalizas se perdieron completamente.
Explicaron que los daños que el huracán ocasionó en el cauce del río Huacapa de inmediato están siendo atendidos y se invierten millones de pesos en repararlos, pero las afectaciones que sufrieron las personas de escasos recursos como son los agricultores simplemente las autoridades hacen como que no las ven.
Los quejosos establecieron que son más de 100 hectáreas de extensión sembradas de maíz y frijol las que destruyó la impresionante corriente de agua que llegó a la presa.
Resaltaron que cuando ocurrió la devastación se encontraba al frente del gobierno Norma Otilia Hernández, quien no realizó su trabajo de documentar las incidencias para que pudiera lograrse una Declaratoria de Emergencia y después la declaratoria de Desastre.
Debido a ello los 50 productores directamente afectados de la presa del Cerrito Rico ni siquiera han sido censados, no han recibido ningún tipo de apoyo y para las autoridades simplemente no existen afirmó el representante de la Unión de Productores de la Presa del Cerrito Rico, José Antonio Vélez Calvo.
Agregó que por si la terrible afectación que sufrieron los 50 productores propietarios de estas tierras y otros 50 que también siembran en ese sitio, ya que por si no hubiera sido suficiente el hecho de que perdieran la totalidad de sus cosechas del ciclo primavera-verano —en la temporada de lluvias—, en estos momentos no pueden sembrar lo correspondiente al ciclo otoño-invierno, porque el vaso de la presa sigue totalmente inundado, ya que las compuertas están cerradas por las obras de rehabilitación que se llevan a cabo en el encauzamiento del río Huacapa.
“Estamos hablando de más de 100 hectáreas que fueron afectadas y el gobierno no nos ha tomado en cuenta para resarcir nuestras afectaciones, además de que toda vez que se mantienen cerradas las compuertas de la presa, por las obras de rehabilitación del encauzamiento del río Huacapa, la parte en la que nosotros trabajamos, permanece inundada la mayor parte”, expresó Vélez Calvo.
Otro problema que trajo consigo el impacto del huracán “John”, indicó, es la enorme cantidad de material pétreo y escombro que arrastró la creciente del río, porque en la parte de arriba “había un tiradero de material de escombro y con el huracán todo ese escombro se nos vino encima y fue arrastrado hacia el “vaso” de la presa afectando varios terrenos”.
Reconoció que la práctica de particulares, e incluso de las “quebradoras” que hay sobre la carretera Chilpancingo-Chichihualco de tirar el escombro a las orillas del río Huacapa no es de ahorita sino que este es un problema que ya tiene muchos años: “metimos solicitudes para atender este problema desde hace dos años, directamente a la gobernadora y al Ayuntamiento, para que se parara eso, pero no se hizo nada…”
Detalló que el problema es que con ese “tiradero de escombro” río arriba de la presa del Cerrito Rico, taparon el cauce, además de que un particular construyó un puente con el que se hizo un dique, razón por la cual “antes del huracán, una creciente que hubo arrastró un montón de escombro y material orgánico, ramas”.