Integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero se instalaron en plantón permanente sobre las fuentes danzarinas de la alameda Francisco Granados Maldonado para defender lo que consideran es el espacio histórico de la lucha 1960 que pugnaba por una universidad para educar a los hijos de los pobres.

Encabezados por Nicolás Chávez Adame, comisarios de comunidades de la Sierra, representantes de los habitantes del fraccionamiento Nuevo Mirador, entre otras organizaciones instalaron el campamento que aseguraron se mantendrá de forma indefinida.

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Nicolás Chávez Adame resaltó que este sitio en el que hoy la presidenta municipal Norma Hernández Martínez, por capricho, colocó unas fuentes danzarinas en un espacio que debe de tener otra connotación cultural e histórica, porque fue en este sitio donde se instaló el campamento de Lucio cabañas y Genaro Vázquez durante el movimiento de 1960.

Asimismo resaltó que en este espacio se encontraba una alegoría arquitectónica con 20 columnas que significaban el recuerdo de cada uno de los caídos en el movimiento que pugnaba por tener una universidad en la que estudiaran los hijos de los campesinos de los obreros y de otras clases pobres de Guerrero.

Por otra parte el movimiento también incluyó en sus posturas la defensa de tres mujeres de la tercera edad que durante más de 40 años han vendido alimentos en casetas que había en la alameda y a las que ahora el gobierno municipal pretende cobrar tres mil pesos de renta mensual para utilizar uno de los locales que se construyeron en el espacio que antes ellas ocupaban.

Las afectas son Lourdes Ramírez Flores, Carmen Hernández Mogollan y Socorro González Gómez, quienes actualmente se encuentran sin una forma de mantenerse porque les quitaron el espacio en que han vendido tortas durante más de 4 décadas.