Integrantes del Frente Popular de la Montaña que desde el martes se movilizan en la capital se reunieron con el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Raimundo Casarrubias Vázquez, a quien le exigieron que el juicio que se sigue por el crimen de Arnulfo Cerón se trate de manera escrupulosa y se evite que se tuerza la ley en favor de los homicidas.
Los quejosos expusieron al magistrado que el juez, Emanuel Reyna Vélez, está actuando con parcialidad omitiendo pruebas que se presentaron y desviando las evidencias para que todo beneficie a los presuntos homicidas material e intelectual.
Agregaron que también se presentaron dos hechos en los que dos testigos se negaron a presentarse a ratificar sus declaraciones porque fueron amenazadas e intimidadas, y esa situación no la valora el juzgador.
Casarrubias Vázquez pidió a los miembros del Frente Popular que tengan confianza en que la sentencia se emitirá en estricto apego a la ley, les pidió tener un poco de confianza, ofreció estará muy al pendiente del tema y revisará que todas las actuaciones se realicen en el estricto marco de la ley.
Los indígenas también exigir una congreso del estado general reformas legales para que en el poder judicial no exista corrupción no existan situaciones a nomás como las que se están presentando en este caso emblemático del asesinato del luchador social Arnulfo Cerón.
Acusaron que el autor intelectual se encuentra en libertad que se pasea en la ciudad de Tlapa y que incluso está trabajando en aspiraciones políticas porque busca ser el candidato de Morena a la presidencia municipal, también es el principal operador de la candidatura de Claudia Sheinbaum.
Ubaldo Segura Pantoja, señaló que esta jornada de lucha se daba en la recta final del juicio, en la que se determinará la culpabilidad de Marco Antonio Morales, un ex funcionario del gobierno de Tlapa, quien fue considerado en su momento como el autor intelectual del homicidio, y quien enfrenta su proceso en libertad, después de pagar una multa.
Antes de ser victimado Arnulfo Cerón acompañó a familias de los 43 estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa y apoyó a comerciantes ambulantes de la ciudad de Tlapa quienes vivían abusos por parte de las autoridades. Fue encontrado sin vida después de 40 días desaparecido, en noviembre de 2019.