TECPAN, Gro.- El promotor cultural Héctor Garnelo presentó en Tecpan su auto Volkswagen Maya adornado con más de 25 mil piedras de obsidiana, con las que diseñó figuras de esa cultura como el Chac Mool, el Kukulcán y el Balam o Jaguar, que adornan el cofre, el techo y los costados del vehículo, con el propósito de promover la cultura mexicana por todo el país y en el mundo, mediante un proyecto denominado La Cultura Sobre Ruedas.
El proyecto consta de cinco autos del mismo modelo, adornados con piedras semipreciosas, la mayoría obsidiana. Entre ellos está el Volkswagen Maya y el Volkswagen Teotihuacano, los cuales fueron premiados en Berlín, Alemania, sede de la empresa automotriz, que los denominó como “los alemanes más mexicanos”, contó el promotor.
El vocho, como se le llama al Volkswagen Sedán, está en Tecpan como parte de un recorrido que el autor de la obra realiza por la Costa Grande de Guerrero, después de estar en Zihuatanejo y Acapulco, para fomentar y promover la cultura mexicana, antes de regresar al Estado de México.
En el cofre del vehículo el artista plasmó el rostro del rey maya Pakal de Palenque, que fue uno de los gobernantes más famosos de la ciudad-estado Maya de Palenque, en México (603-683 d.C.), y la imagen de su rostro es uno de los íconos más conocidos de esa civilización. Fue uno de los gobernantes más longevos de Palenque, y en sus 68 años de reinado construyó muchos de los templos y pirámides cuyas ruinas destacan el esplendor alcanzado por la Cultura Maya y su importancia en Mesoamérica.
En el techo del mismo se ubica la imagen del dios Kukulcán, que es una deidad de la mitología maya, cuyo nombre significa, en la lengua maya-yucateca, serpiente de plumas, por su semejanza con la serpiente emplumada, cuyo culto es uno de los más relevantes en Mesoamérica y está relacionada con el viento y el agua.
Al costado derecho, está la figura de un marcador del juego de pelota maya de Chichén Itzá, formado por dos anillos de piedra, que llevan las representaciones de dos serpientes emplumadas entrelazadas, lo que los convierte en portales hacia el inframundo, en consonancia con el profundo sentido ritual del juego.
En ese mismo costado está la imagen más pequeña de un Mam o cargador del tiempo o del año, que en la Cultura Maya vienen a ser el patrón de todo el año, o el día más significativo, puesto que entre otras cosas define el sentido o contenido de todo el año.
En el costado izquierdo, del lado del conductor, está la figura de Balam o guerrero jaguar, que eran ciertos guerreros profesionales miembros del ejército maya, pertenecían a la clase baja, conocida como los mācēhualtin. Estos soldados eran las "fuerzas especiales" del Estado Maya, diferentes a los guerreros águila (cuāuhpilli), que procedían solamente de sangre perteneciente a la nobleza. Y a un costado está la figura del Chac Mool, que es una escultura propia de la Cultura Tolteca y Maya-Tolteca, que representa a una figura humana reclinada, que sujeta con las manos un recipiente sobre su vientre, el cual servía para colocar ofrendas rituales.
El auto estará expuesto al público en el Zócalo de Tecpan hasta el martes, para después trasladarlo al Estado de México, indicó su creador.