Pobladores del municipio de Cocula advirtieron que impedirán la operación de actividades en la Minera Media Luna si el gobierno en sus tres niveles no actúa para detener el avance del grupo delictivo conocido como la Familia Michoacana, que se acerca desde la región de Tierra Caliente.
Los habitantes del poblado de Nuevo Balsas, perteneciente al municipio de Cocula, indicaron que ante las amenazas de ese grupo delictivo han formado una policía comunitaria que no es suficiente para detenerlos.
Entre los quejosos se encuentran representantes ejidales, mineros, pescadores y dirigentes de la policía comunitaria, quienes expresaron que las tierras en que trabaja la minera es de ellos y detendrán las operaciones de la empresa Torex Gold si no se frena a los delincuentes michoacanos.
Establecieron que los hombres armados de ese grupo se encuentran asentados ocho kilómetros de su pueblo y en los últimos dos meses han sufrido acciones de violencia.
Establecieron que este grupo delincuencial ha generado desplazamientos de personas en pueblos de Apaxtla desde la presa El Caracol, así mismo en poblaciones pertenecientes al municipio Heliodoro Castillo, donde los habitantes huyeron por la violencia.
“Aquí en Nuevo Balsas tenemos a decenas de familias; la mayoría trabajaban de pescadores y en este momento están en la zozobra de sufrir un ataque delincuencial".
“En 2013 estuvieron aquí y sometieron al pueblo; por eso conformamos nuestra policía comunitaria y los corrimos; además, con el pueblo de Tlanipatlán, instalamos puestos de revisión”, pero reconocieron que su capacidad de defenderse está superada por el las armas que tiene los michoacanos, “nosotros sólo tenemos algunas escopetas y pistolas ellos traen armas de alto poder”, por ello no descartan tener que adquirir armamento que les permita responder.
De acuerdo con registros oficiales la mina Media Luna se estableció en Nuevo Balsas en 2010, y en 2016 comenzó la extracción de minerales como oro, plata, plomo, zinc y cobre y por su capacidad de producción es considerada una de las más grandes de América Latina.
La extracción se realizó a cielo abierto y recientemente se anunció que también explotarían en una mina subterránea, todo en terrenos de las poblaciones de Los Guajes y El Limón.
Van por utilidades
Los lugareños señalaron que todo indica que el avance del grupo delictivo es porque muchos trabajadores de la mina recibirán las utilidades que da la empresa y se quieren apropiar de ello pues es casi como un ahorro que los obreros hacen todo el año.
“En la mina laboran unos mil 500 obreros”, a esto se suman los trabajos indirectos de más de 5 mil personas en Nuevo Balsas por lo que hay mucho circulante y eso atrae a los delincuentes.