Durante la madrugada del sábado fue derribado el basamento ubicado en una jardinera del Palacio de Cultura, sobre la que se erigiría la estatua a Aurora Mesa Andraca, la primera mujer en gobernar Chilpancingo.
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La obra fue cuestionada desde un inicio y se criticó principalmente por su ubicación, pues iba a restar visibilidad al inmueble al estar justo enfrente.
El martes pasado el Cabildo votó a favor de que este monumento fuera colocado sobre el andador Emiliano Zapata, frente al Museo José Juárez, un inmueble que perteneció a la familia Mesa.
En un recorrido por el zócalo, ya no fue visibilizada la estructura de tabicón y cemento y únicamente se encontraron unos arbustos y flores reciben plantadas.
La demolición del basamento se debió en parte a que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) recomendó al municipio que ese lugar en el que se intentaban colocar una estatua para homenajear a Mesa Andraca, era técnicamente inviable.
Las críticas que surgieron a raíz de la construcción de este monumento, detonaron en que la alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández Martínez, denunciara ser víctima de violencia política, al existir opositores que criticaban sus obras y programas de gobierno.