De acuerdo con la apreciación del obispo de Chilpancingo, Salvador Rangel Mendoza, en la zona de la sierra se tiene las condiciones adecuadas para que el proceso electoral se desarrolle en paz y sin violencia, sin embargo quienes verdaderamente definen a los gobernantes serán los señores del narcotráfico, a quienes los políticos están pidiendo anuencia para poder registrarse y sólo con su aval pueden hacer campaña.
El obispo, indicó que particularmente en la sierra, el proceso electoral ya se ha definido, "creo que ya está decidido porque ahí sabemos que quien domina es un grupo especial".
Refirió que el poder fáctico de la sierra se concentra todo en un sólo grupo, antes había un contrapeso asentado en el municipio de Leonardo Bravo, pero este fue desaparecido y ahora los grupos delincuenciales de esta zona se han unido con el grupo de la zona de Tlacotepec, que es quien controla todo el poder económico y político.
"Algunos personajes yal es dieron a bendición de que se lancen en ese sentido ya la tiene segura, sea así o de otra manera lo más importante es que no haya violencia, ni asesinatos".
Señaló que en esta circunstancia se puede decir que la sierra está en paz y hay condiciones para desarrollar el proceso electoral, "aunque vuelvo a insistir atrás de ellos están los grupos de narcotraficantes".
Insistió en que será muy dificil y desafiante que una persona que no pertenezca o tenga la venia de estos grupos criminales pueda ir a la sierra a realizar una campaña política.
"Lo creo así no creo que alguien vaya a hacer la competencia o vaya a subir a la sierra a los municipios que están controlados por esas personas".
Mencionó que la sierra es una región del estado donde están municipios que tienen ciertos subsidios gubernamentales y de estos los delincuentes toman una parte, asimismo están las minas que son un gran aporte de recursos para estos grupos.