Familiares de víctimas de desaparición forzada, tortura y detenciones ilegales, que cometió el ejército mexicano durante la llamada Guerra Sucia, protestaron en la puerta del cuartel del sexto batallón de Ingenieros de combate, sitio en el que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda encabezó el festejo por el día de la fundación del Ejército.
Los colectivos demandan tener mesas de trabajo con el presidente Andrés Manuel López Obrador y con la gobernadora Evelyn Salgado Pineda para exponerles directamente los casos de desaparición que se encuentran en la impunidad, de los que en varios de ellos se tienen pruebas y evidencias de que fue el Ejército quien los detuvo, desapareció o asesinó.
Señalaron que la Comisión para el Acceso a la Verdad y la Justicia, que creó la presidencia de la república, no ha tenido resultados positivos y dicho por ellos mismos, es muy poca la evidencia que han podido recabar, porque el ejército se mantiene en la postura de tener cerrados sus archivos.
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Demandaron a la Comisión trabajar de manera honesta y reponer a la comisionada Aleida García Aguirre quien renunció debido a que consideró que no hay condiciones para hacer un trabajo como el que les encomendaron, qué es investigar las desapariciones forzadas que se cometieron del 65 al 90 del siglo pasado.
Durante el mitin se exigió a esta comisión que instale una oficina de atención en el municipio de Atoyac porque fue esta zona donde se registró el mayor número de agravios del ejército hacia el pueblo, debido a que en la sierra de este municipio, es dónde sentó sus bases el grupo que encabezó Lucio cabañas.
“Demandamos tener acceso pleno a la justicia y reparación integral de los daños que cometió el ejército al desaparecer a nuestros padres a nuestros hermanos” señaló Octaviano Gervasio Serrano, quién busca a su padre Que fue detenido por militares y nunca más supieron de él.
Durante la protesta los colectivos de familiares de desaparecidos de la llamada guerra sucia colocaron cartulinas con las fotos de las víctimas y leyendas que indicaban que fue el ejército el responsable de sus desapariciones.
Ahí mismo entregaron dos documentos dirigidos uno a los militares en el que le exigen que abran los archivos para tener acceso a la verdad y la justicia y el otro se dirigió a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda a quien le demandan sentar una mesa de trabajo que se la han solicitado desde hace más de un año y ni siquiera se ha dignado responder alguno de los oficios.