La presencia de militares, Guardia Nacional y Policías Estatales, ha permitido restablecer de manera paulatina la normalidad en el municipio de Leonardo Bravo, tras la incursión de hombres armados que hicieron disparos a viviendas y quemaron vehículos el lunes por la madrugada.
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En el ambiente se respira una tensa calma, todavía hay comercios cerrados y el servicio de transporte que se suspendió hasta el medio día de este lunes, circula sólo la mitad del parque vehicular para cubrir la ruta Chilpancingo-Chichihualco.
Los padres de familia optaron por no llevar a sus hijos a las escuelas, por lo que este martes tampoco se pudo reanudar las clases correspondientes al ciclo escolar 2023-2024, por lo que hay el riesgo de que se extienda lo que resta de la semana y presentarse el lunes.
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado reportó que se mantienen operativos de seguridad, en coordinación con personal del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y Policías Ministeriales, estos últimos continúan con las investigaciones.
Uno de los vecinos del lugar señaló que las autoridades municipales pidieron al gobierno federal y al estado, la instalación de bases de operaciones mixtas permanentes, porque hay temor de una nueva escalada de violencia por parte de grupos vinculados con el crimen organizado.
Las viviendas que presentan huellas de la refriega, todavía están sin observar movimiento, aparentemente están abandonadas, nadie habla del tema y se palpa el temor entre la gente, que presurosos caminan por las semivacías calles de esta cabecera municipal.
