Por temor a denunciar y ser víctimas de extorsión, un 50 por ciento de empresarios materialistas de Guerrero han emigrado a otros estados y han cerrado sus negocios o en otros de los casos han dejado a sus administradores que los operen, provocando que ya no genere la riqueza económica.

Elodia Vargas, Presidente de los materialistas del Estado de Guerrero dijo que el 100 por ciento de los delitos de extorsión que se registran entre su sector no se denuncian por miedo.

“Aquí en Acapulco quedamos pocos (materialistas) y muchos ya no están aquí, se fueron a otro estados por su propia seguridad y manejan sus negocios con administradores”.

Añadió que además de que algunas casas de materiales han cerrado, otros las han rentado como bodega o se han convertido estos espacios en tienda de conveniencia.

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Dijo que los empresarios ya no quieren seguir dedicándose a la venta de materiales, “porque tenemos que pagar un impuesto criminal que es el derecho de piso, ellos saben dónde nos ubicamos o pagas o pagas.

Elodia Vargas, dijo que el temor más grande con los materialistas es el tema de la actuación de que no pueden denunciar por miedo y porque puede ser contraproducente.

“A muchos compañeros lo que nos ha pasado es el miedo de denunciar porque esas mismas personas que son las que aportamos las denuncias nos acusan con el otro bando y tememos a lo que se llama la represión contra ellos y cómo no sabemos de dónde son y dónde viene y qué es lo que está pasando, ya se están ejerciendo mucha impunidad”, precisó.

Reveló que otro caso que se ha presentado es que se han encontrado con la llamada “puerta giratoria”, que es que cuando denuncian se detienen al presunto extorsionador pero paga una fianza de 2 mil hasta 8 mil pesos y salen libre con mucha impunidad.

Comentó que los ingresos que generan las casas de materiales ahora se han ido a otros estados donde deciden invertir.

“La riqueza económica ya no se queda aquí en el estado y sólo se está creando más pobreza y como nosotros trabajamos con un tejido social muy castigado que son los trabajadores muchas veces estas personas ya traen problemas de Adicciones”.

En ese sentido, dijo que además del delito de extorsión, los pocos empresarios materialistas que quedan se tienen que enfrentar al hostigamiento por parte de corporaciones policiacas.

Y es que, luego detienen a los trabajadores de las casas de materiales cuando llevan mercancía y les han encontrado un cigarro de marihuana y por este tipo de situaciones pues de tipo de situaciones los paran a cada rato.

Dijo que muchos extorsionadores mandan a menores de edad y a esos jóvenes, los detienen y los meten al tutelar de menores, donde los tienen por meses y en un año salen libres o cuando son mayores de edad.

Dijo que aplauden lo que pretende crear la fiscalía de Guerrero cómo el renovar el personal, quitar los vicios añejos creer que hay una impartición de justicia, “queremos tener confianza”.