Un sistema de salud tradicional basado en las enseñanzas que nos heredaron los pueblos mesoamericanos se mantiene en la colonia Comunidad Indígena Emperador Cuauhtémoc de Chilpancingo, en este sitio se atiende cualquier enfermedad mediante herbolaria, tinturas, masajes, ventosas y con un temazcal.
El sitio es atendido por 11 personas, todos indígenas avecindados en la capital del estado que se e han preparado en las diferentes ramas de la medicina tradicional para poder ofrecer la sanación de las tres partes que componen el cuerpo humano que son el cuerpo físico, el alma y el espíritu.
Hugo Juárez Ocampo quien es p arte de del grupo de salud de la Comunidad Indígena Emperador Cuauhtémoc, destacó que este proyecto se inició hace 18 años, entonces fueron al estado de Morelos y allá les capacitaron para la construcción y uso del temazcal, después con el hermanamiento que tienen con otros grupos indígenas del país, han aprendido temas de herbolaria, masajes, ventosas, microdosis de tinturas, jarabes, tónicos, incluso acupuntura.
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El sistema comunitario de salud surge como una necesidad de los habitantes del asentamiento, pero hoy se ha convertido en una alternativa para toda la población pues cada dos semanas que encienden el temazcal son decenas de personas que llegan al lugar buscando sanación.
Destacó que en Chilpancingo hay varios temazcales que ofrecen servicio a la población, pero la mayoría funcionan únicamente como un baño sauna, porque el temazcal tiene que estar acompañado de un ritual que tiene que ver con la cosmovisión de los pueblos originarios en la integración del ser humano que conlleva a los cuatro elementos de la naturaleza. “El Temazcal es eso es un instrumento que cura esos tres cuerpos y el cuerpo espiritual es el soplo divino que anida en ti”
“El temazcal tiene la cualidad de curar esos tres cuerpos, cuerpo físico es nada más este cascarón que nos sirve para el paso por la vida terrenal. Cuando tú naces del útero de tu madre y jalas el primer aliento se forma tu aura, tu luz que te cubre, en las comunidades le llaman tu sombra. Los abuelos decían que ahí estaban los desequilibrios ellos ni siquiera le llamaban enfermedades, eran desequilibrios desde tus cuatro elementos, de tu agua, tu fuego, tu aire y tu tierra, o sea, nosotros estamos constituidos de lo mismo que está hecho el universo, somos parte de él, es otra visión totalmente diferente a la cultura occidental”.
Agregó que este sistema de medicina tiene un enorme respeto hacia la madre naturaleza porque somos parte de lo mismo, “los pueblos indígenas cuidan tanto los ríos, los bosques, porque saben que si los destruyen, se destruyen ellos mismo”.
Otro de los factores que influyen sobremanera en la aplicación de tratamientos de sanación es la dualidad del ser humano, es decir la concepción del genero masculino y femenino. “El Temazcal es de manera redonda como bóveda porque simboliza el universo, también el universo es dual, hay energía de luz y energía de oscuridad, energía negativa y positiva, lo de arriba es masculino lo de abajo femenino, es decir, existe una relación de alternidad en el universo desde siempre dual”.
Para sanar debes manejar esa visión de lo contrario no entenderías cómo curar, las plantas también hay masculinas femeninas, hay frías y calientes. Se clasifican por sus colores de las flores, por la posición de sus hojas, por el brillo de sus hojas, si una planta tiene las hojas hacia arriba es masculina, si las tiene hacia abajo son femeninas, si es verde brillante es masculina, si es verde opacas femenina.
“El Temazcal es fundamental para para curar, porque el fuego es un elemento de sanación importantísimo, pues nuestros ancestros le llamaban Huehueteotl, que era el abuelo fuego y en el temazcal existe una representación simbólica de una relación erótica, se podría decir entre Huehueteotl y Tlali Nantli, la Madre Tierra. Los simboliza el útero de la madre tierra por eso se entra en lo oscuro y se purifica al salir es como un nuevo nacimiento”