A casi cinco años de haber sido damnificadas por el huracán “Ingrid” y la tormenta “Manuel”, 26 familias volverán a perder sus hogares pues las casas que les entregó la Sedatu en la colonia El Mirador se han dictaminado como de alto riesgo y tendrán que ser desalojadas.
Los moradores de las viviendas han tenido que ir hasta la Ciudad de México a buscar respuestas por la crítica situación en que se encuentran las casas y el temor de que puedan colapsarse, además de que todas, sin excepción, tienen filtraciones de agua en las lluvias.
“No podemos arreglarles nada porque pierden garantía y la empresa tampoco viene a repararlas porque se declararon en quiebra para no tener que seguir gastando en este proyecto que evidentemente falló”, comentó una de las representantes de la manzana 3E que se encuentra en lista de revisión para verificar su estabilidad.
Y es que 56 de las viviendas que se ubican en la manzana 2E desde su construcción no pudieron ser habitadas debido a que el terreno se deslizó y las casas tuvieron cuarteaduras, por lo que se mantuvieron abandonadas y ante el riesgo de que colapsen la Sedatu inició procesos legales que le permitan demoler las viviendas.
En revisiones recientes se detectó que el deslizamiento del suelo afectó también la manzana 1E y de esta tendrán que ser evacuadas 26 familias, que tendrían una posibilidad de regresar a las viviendas una vez que se concluya la demolición de las de la manzana 2E si las revisiones indican que las construcciones son estables y no se dañaron más con los trabajos.
“Nos dijeron que las casas serán desalojadas, pero hasta el momento no nos han dicho a dónde se van a ir estas familias, si les van a construir algo temporal, si les apoyarán con una renta o qué se hará con ellas, mientras les reponen la vivienda».