Huérfanos, viudas y padres de seis policías que fueron emboscados y asesinados en la región de Costa Grande en el mes de abril, actualmente se encuentran en total desamparo, debido a que el Gobierno del Estado incumplió con el pago de seguros, la entrega de becas y las pensiones, por si eso fuera poco, en la Fiscalía General les negaron información sobre qué tanto se ha avanzado para esclarecer estos crímenes.
El grupo de familiares acudió ayer a la Fiscalía General del Estado, donde se entrevistaron con el encargado de la Vicefiscalía de Investigación, Héctor Salvador Calleja Paniagua, sin embargo, el funcionario les indicó que no podía darles ninguna información respecto a la investigación que se sigue por los crímenes.
Después fueron al Palacio de Gobierno para tratar de tener una reunión con funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública, a quienes exigirían el pago inmediato de finiquitos, gastos funerarios, seguros, pensiones, becas para los huérfanos y otros beneficios a los que tienen derecho y que el gobernador ofreció personalmente.
El señor Moisés Figueroa Estrada, padre de Juventino Figueroa Estrada, indicó que cada 15 días tiene que hacer el viaje desde Malinaltepec a Chilpancingo para preguntar por el avance de la investigación y el tema de los pagos, que no les han entregado.
«Mi hijo era soltero, pero nos apoyaba para la manutención de su madre y sus hermanos pequeños que están en la escuela, hoy no tenemos ese apoyo del que dependía la familia».