Con el apoyo del Ejército Mexicano, Marina Armada de México y Tránsito Estatal, inspectores de la dirección técnica de Transportes del estado están dando cumplimiento al decreto que emitió el gobernador Héctor Astudillo Flores, para que todos los choferes del transporte público usen el cubrebocas de manera obligatoria o se les sanciona con una infracción por cinco salarios mínimos.
Así lo informó el titular de la dependencia, Miguel Ángel Piña Garibay, quien reconoció que, en estos momentos es muy complicado sancionar económicamente a los trabajadores del volante del transporte público, porque están conscientes del grave panorama que prevalece por la pandemia, por lo que se está privilegiando el diálogo, ante todo.
“Los inspectores tienen instrucciones que, cuando un taxista, urbanero o conductor de una Urvan, no traiga el cubrebocas se le dé una explicación de la importancia de usar la mascarilla y se le proporciona una de manera gratuita y un gel antibacterial, pero si se porta grosero e insulta al personal se le sanciona”, apuntó.
El funcionario estatal, Piña Garibay, también, aclaro que, en lo que establece que el trabajador del volante también se le sancionara si presta el servicio de transporte a usuarios que no usen el cubrebocas, explicó que se deja sin efecto, porque no es posible que se les obligue a los pasajeros a usar el protector facial.
Asimismo, señaló que en lo que se refiere a la petición de ser integrados a los programas de apoyo económico, indicó que ha acompañado a los dirigentes de los transportistas en las reuniones con representantes del delegado federal en Guerrero, Pablo Almicar Sandoval Ballesteros y del subsecretario de gobierno del estado, Martín Maldonado, para darles curso a sus peticiones.
Aseguró que se les sigue atendiendo y no hay indiferencia a las necesidades de los transportistas, porque se les está atendiendo dentro de sus posibilidades.