Trabajadores de comercios asentados alrededor del Palacio de Gobierno en Chilpancingo, comenzaron a padecer los estragos del blindaje al recinto, con la pérdida de ingresos.

Mariano Prudente, un encargado de un estacionamiento, señaló que desde el viernes no tiene ingresos, debido a que casi a la entrada de su negocio fue colocado un muro de contención para evitar el paso de vehículos.

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Señaló que lo que genera su estacionamiento es el único ingreso que tiene, con el que saca a flote a su familia.

Mencionó que ha pedido a las autoridades que puedan mover el concreto para que vehículos hagan uso del estacionamiento.

Sin embargo, dijo que ninguna autoridad le ha dado respuesta a su inquietud, por lo que lanzó un llamado a las autoridades a que atiendan su demanda.

Está misma situación se repite con tienditas y restaurantes que se encuentran cercanos al Palacio de Gobierno, quienes de plano han tenido que cerrar sus puertas temporalmente ante la incertidumbre generada.

Desde el jueves, los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, han realizado acciones radicales luego del asesinato de uno de sus compañeros en manos de la Policía Estatal.