Aunque la temporada de venta de artículos navideños ha estado dentro de lo normal y se vendió la suficiente para reportar ganancias, comerciantes instalados en la calle Baltazar R Leyva Mancilla, señalaron que tenían un sector de clientes provenientes del puerto de Acapulco que no vinieron este año a comprarles mercancía.

“La temporada ha estado regular, unos días con buena venta potros con no tanta pero dentro de lo normal”, explicó la señora Alejandra Mancilla Duarte, una comerciante que ha trabajado este tipo de mercancía durante 32 años.

Comentó que ella es heredera de una tradición familiar de venta de artículos de temporada, que empiezan con lo navideño en diciembre luego venden regalos infantiles para el Día de Reyes.

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Resaltó que cada año tiene clientes que vienen del puerto de Acapulco y les venden mercancía a precio de mayoreo pero este año no vinieron, “tenía su teléfono de unos de ellos le estuve marcando para preguntarle como están pero logré comunicarme, yo espero que estén bien, que no les haya pasado nada con el huracán y el próximo año regresen a contar todo como una experiencia más”.

En Chilpancingo los puestos de la calle Baltazar R Leyva Mancilla se han convertido en una tradición de venta de artículos navideños porque en ese lugar se encuentran artículos a buen precio, muchos de ellos elaborados de forma artesanal, a diferencia de los que se adquieren en tiendas departamentales que son de líneas más caras.

La familia de Alejandra se dedicó al comercio de artículos navideños y hace 32 años un tío le ofreció que fuera con él a surtir los productos en la ciudad de México, entones aprendió este negocio, los sitios y fechas en que se tiene que ir a comprar para tener buen precio y de esta manera poder dar una atención adecuada a sus clientes.

Desde ese año Alejandra no ha dejado de vender mercancía navideña y asegura que mientras Dios le preste vida seguirá haciéndolo porque además de que le registra un ingreso económico es satisfactorio ver a las personas que se van contentas con la mercancía, “de verdad no se imaginan como es bonito que la gente te bendiga porque le hiciste un descuento, que se vayan sonrientes y emocionados de que ya pondrán sus adornos de navidad”.

Finalmente insistió en elevar oraciones para que sus clientes de Acapulco estén bien, de salud “ojalá y que la navidad sea una época que puedan disfrutar aún en la adversidad”.