Un total de 12 árboles caídos en el municipio de Chilpancingo, cinco casas inundadas, calles encharcadas en prácticamente toda la capital y un flujo de agua que alcanzó el 60 por ciento de la capacidad del cauce del río Huacapa es el saldo de la tromba que cayó la tarde del sábado confirmó Protección civil del municipio.
De acuerdo con el coordinador Municipal de Protección Civil, Sergio del Moral Benítez, la tromba que azotó las zonas oriente y norte de Chilpancingo dejando múltiples afectaciones, por lo que se tuvo que desplegar personal de todas las áreas operativas del gobierno municipal para atender las afectaciones.
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Entre los años se cuenta el encharcamiento del puente Benito Juárez donde colapsaron las rejillas, el nivel del agua ocasionó que varios autos quedaran varados y sufrieron daños por el agua. Frente a la central de autobuses la basura ocasionó taponamiento de alcantarillas por lo que el agua provocó la interrupción del flujo vehicular tanto en la lateral como en el carril de alta velocidad.
Las Barranca de Chuchululuya, Jalahuatzingo y Alpoyeca tuvieron estuvieron a punto de desbordarse debido a la inmensa cantidad de agua que cayó durante la tarde del sábado, incluso en algunos puentes las barrancas se salieron del cauce sin llegar a inundar viviendas.
De los 12 árboles caídos dos se reportaron en la comunidad de Amojileca otros 10 en diversas colonias de la capital, ello por los vientos intensos que acompañaron a la lluvia.
El nivel de alerta generado en la capital especialmente fue por el río Huacapa mismo que en pocas horas de lluvia alcanzó hasta un 60 por ciento de su capacidad, por lo que de haber durado más tiempo la lluvia con la misma intensidad podría haberse desbordado y causar afectaciones como las que se tuvieron en el 2013 con las tormentas Ingrid y Manuel.
En la colonia Galeana cinco viviendas fueron reportadas con introducción de agua que dañó algunos muebles y en seres, esta inundación tuvo origen en el taponamiento de alcantarillas por basura y material pétreo que se ha dejado en las calles y la afectación más cuantiosa fue la que se generó en el andador Zapata de donde el viento y la lluvia destruyeron varios puestos ambulantes, causando la pérdida total de la mercancía.