El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) en Chilpancingo, Iván Salgado Ramírez, recordó que tras el paso del huracán Otis el año pasado en Guerrero, la capital logró abastecer la demanda de bienes y servicios de cientos de acapulqueños.
Mencionó que en ese momento de emergencia, varios negocios de Chilpancingo, reportaron un incremento en sus ventas de hasta el 50 por ciento.
Indicó que este incremento fue temporal y que principalmente se registraron en algunos negocios como restaurantes, el sector ferretero y pinturas.
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También está situación se replicó en las tiendas de abarrotes, tiendas departamentales, así como otros giros enfocados a los servicios.
Expresó que hubo otros giros que también resultaron beneficiados, puesto que la población buscaba expertos para hacer reparaciones, y otros buscaban adquirir muebles.
Y es que días después del paso del huracán Otis, cientos de personas acudían de Acapulco a Chilpancingo a realizar las compras de la canasta básica.
Incluso hubo otro sector que se quedó viviendo temporalmente en Chilpancingo, en lo que se restablecían los servicios en el puerto.
El líder de los empresarios expresó que el paso del Huracán John en Chilpancingo no generó este mismo efecto debido a que no fue tan devastador como Otis.
Ante esa situación, comentó que el mismo municipio de Acapulco, que fue donde se presentaron las principales afectaciones, pudo solventar sus propias necesidades.