El módulo de pruebas rápidas para la detección del Covid-19, que se ha mantenido en el kiosco de Chilpancingo prácticamente desde del inicio de la pandemia, dejó de prestar servicio al público, en el espacio solamente se quedaron cartulinas informando que no se tomarán pruebas hasta nuevo aviso.

El módulo de pruebas para detectar Covid se instaló en julio del 2020, originalmente de manera coordinada entre el gobierno del estado y la Universidad Autónoma de Guerrero, ya que el laboratorio que instaló la máxima casa de estudios era el encargado de procesar las muestras.

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Inicialmente se pudieron seis módulos en diversas partes de la capital, sin embargo con el paso del tiempo se fueron cerrando y sólo quedó activo el del kiosco de la alameda Granados Maldonado, donde se siguieron tomando las muestras para enviarlas al laboratorio de la Universidad y al laboratorio estatal de la Secretaría de salud.

Con al llegada de las pruebas rápidas la secretaría de Salud dedicó el espacio a la realización de pruebas diagnósticas que se entregaban en un par de horas y a la par se popularizaron laboratorios que realizan la misma prueba a precios cada vez más accesibles, a pesar de ello la demanda de servicio en la alameda sigue siendo la única alternativa de confirmar la presencia del Covid para personas de escasos recursos.

Hasta la semana pasada el modulo mantenía su trabajo de lunes a viernes, hasta hace unos días que se colocaron cartulinas indicando que ya no se prestará servicio hasta nuevo aviso.

Aunque no hay información oficial respecto al cierre del modulo se especula que tiene que ver con el paro de labores que se mantiene en el sector salud que reclama el pago de prestaciones y resolver el problema que se tiene con el adeudo de más de dos mil millones de pesos al ISSSTE por cuotas sindicales que no se han presentado en tiempo y forma.