La carretera federal Acapulco-Zihuatanejo se encuentra repleta de basureros clandestinos; automovilistas que transitan por la vialidad tiran sus residuos sólidos sin que ninguna autoridad local o estatal haga algo al respecto para evitar la contaminación.
Son decenas de basureros clandestinos los que se pueden contabilizar en la citada vialidad federal; durante el trayecto se puede apreciar todo tipo de desechos de plástico que las personas tiran por las ventanas de sus vehículos.
Entre los desechos resaltan artefactos de unicel, plástico, madera, animales muertos, muebles, neumáticos, alambre, entre otros residuos.