El café de Zihuatanejo ha emergido como un producto de alta calidad con potencial para convertirse en un atractivo turístico destacado en la región. Sin embargo, su pleno desarrollo requiere del apoyo y la atención de las autoridades estatales y federales.
Oscar Bucio, un destacado productor local, resalta la excelencia del café zihuatanejense, que cuenta con una gran variedad especializada y calificaciones que oscilan entre los 84 y 90 puntos, lo que lo hace apto incluso para los paladares más exigentes.
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Con suficientes plantaciones, herramientas de producción y personal capacitado, el café de Zihuatanejo está listo para ser descubierto por los amantes del café de todo el mundo. Sin embargo, existen desafíos logísticos que obstaculizan su pleno potencial.
Actualmente, el acceso a las plantaciones de café en áreas como Leyva Mancilla, Las Lagunas y La Culebra en la sierra del municipio es limitado y complicado. Los visitantes enfrentan caminos que pueden tomar hasta 3 horas para recorrer. La construcción de nuevas brechas viales podría reducir este tiempo a tan solo 40 minutos, facilitando así la experiencia de los turistas interesados en descubrir los secretos del café local.
Aunque algunos turistas internacionales, incluyendo italianos, franceses, estadounidenses y canadienses, ya han tenido la oportunidad de degustar el café de Zihuatanejo, es esencial que las autoridades no pierdan de vista el potencial turístico que este producto representa.
Es fundamental facilitar el acceso y la promoción de estas experiencias únicas que enriquecen la oferta turística de la región.
