La brigada de búsqueda en vida que realizaron colectivos de familiares de desaparecidos en el estado de guerrero permitió la localización de seis víctimas tres de estas se encontraban en el centro de readaptación social de Acapulco, desde hace 4 años y sus familiares lo desconocían.
De acuerdo con información del colectivo María Herrera, las actividades que se realizaron durante tres días en Chilpancingo y Acapulco permitieron también localizar tres cuerpos que se encuentran en el Semefo y sus familiares los buscan en otros estados del país.
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En conferencia de prensa esta mañana, la representante del colectivo, Gema Antúnez, informó sobre la localización de la maestra Marla Jiménez Carachure de Chilpancingo, quien desapareció el 21 de julio de 2019 en Acapulco; Goyita Ortiz Garnica, de Guadalajara, y el hijo de la señora Sonia Povedeno, del colectivo Una Luz en el camino, de la Ciudad de México, de quien no proporcionaron el nombre.
En el caso de las personas que fueron localizadas con vida dentro del Cereso de Acapulco, se trata del hijo de la señora Luisa Romo, del colectivo Voz, que pide justicia por los desaparecidos de Torreón Coahuila, de quien no especificaron nombre; de Valentín Santibañez Ramírez originario de la Ciudad se México, y José Manuel Ramos Catalán, este último lleva cuatro años detenido en el Cereso sin que su familia fuera informada.
Los integrantes de los colectivos reprocharon la falta de apoyo por parte de los gobiernos de Zihuatanejo y Ayutla quienes se negaron a proporcionarles espacios para que los brigadistas pudieran pernoctar en albergues del DIF. Ello habría permitido extender la búsqueda en centros de readaptación de esos municipios, también en centros de tratamientos de adicciones y otros espacios.
La brigada también incluyó manifestaciones en espacios públicos en los que se pidió la colaboración de la sociedad en general para que en caso de que tengan algún indicio del sitio en que se encuentre algún desaparecido, o fosas clandestinas lo hagan llegar de manera anónima a los colectivos o incluso también podrían llevar cualquier información a través de los sacerdotes católicos y que sean ellos quienes la entreguen a las autoridades o a los colectivos para que se hagan las búsquedas.