Integrantes de la Unión de Colectivos de Familiares y Víctimas de la Guerra Sucia revelaron que en la sierra del municipio de Ajuchitlán del Progreso se tiene identificados sitios en los que podrían estar sepultados 24 víctimas de desaparición forzada, que fueron detenidos por el Ejército y asesinados extrajudicialmente, en algunos casos obligaron a sus familiares a cavar las fosas.
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De acuerdo con Octaviano Gervasio Serrano el próximo 4 de septiembre iniciará en este lugar la búsqueda de cuerpos, refirió que se tiene datos sólidos de ocho cuerpos porque familiares fueron obligados a sepultarlos y tienen referencia del sitio donde quedaron.
A raíz de que se visibilizara el tema y se hiciera presión para que la Comisiones Nacional y estatal de Búsqueda programen trabajos para ir a excavar, otras familias han aportado datos y denunciado hechos que se habían mantenido en silencia por el miedo.
“Hoy están denunciando y ofreciendo elementos que permiten establecer los lugares donde los sepultaron en la misma zona y que revelaría la atrocidad que cometieron los militares en este municipio”.
Resaltó que una vez que se logre recuperar los restos será exhibida la verdad, la saña con que el estado a través del Ejército trataron de exterminar a la población de comunidades.
En la conferencia se estableció que el gobierno de AMLO se ha negado a abrir los documentos de la llamada Guerra Sucia, porque hacerlo representaría una evidencia de que la corporación a la que se ha dado todo tipo de canonjías y se les ha incrementado su nivel de actuación en el país.
Gervasio Serrano explicó que las autoridades han revelado que aún hay 300 militares vivos que podrían haber tenido implicación en actos de asesinatos y desapariciones de la llamada Guerra Sucia, se ofreció que serían llamados a declarar para que pudieran aportar datos sobre el paradero final de los desaparecidos, pero hasta el momento no hay citado a ninguno.
La fecha prevista para hacer estos trabajos de búsqueda y exhumación de restos de víctimas de la llamada Guerra Sucia será del 4 al 8 de septiembre y esperan que la fecha no se reprograme porque es necesario que después de 50 años buscando tengan finalmente información de donde quedaron sus padres o esposos.