La Sexagésima Segunda Legislatura de Guerrero registró este miércoles una iniciativa con proyecto de decreto en materia electoral, con la que se pretende normar que tanto partidos políticos como aspirantes a cargos de elección popular suspendan los actos masivos de campaña para evitar la propagación de la covid-19.
El martes, el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) de Guerrero aprobó por mayoría un exhorto para que se respeten las medidas sanitarias debido al semáforo epidemiológico.
El diputado Marco Antonio Cabada Arias informó que se pretende adicionar el artículo 281 BIS de la Ley Número 483 de Instituciones y Procedimientos Electorales del Estado de Guerrero en el que se señala lo siguiente:
“Tratándose de contingencia sanitaria y/o pandemia, los partidos políticos, las coaliciones, las y los precandidatos o candidatos registrados, deberán respetar los protocolos sanitarios o abstenerse de ser el caso, de realizar reuniones públicas, actos masivos o marchas para evitar conglomerar personas en sus actos políticos.
ARTÍCULOS TRANSITORIOS.
PRIMERO. El presente Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado de Guerrero.
SEGUNDO. Publíquese el presente Decreto para el conocimiento general en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado.
Cabada Arias consideró que ante la emergencia sanitaria a la que regresó Guerrero, desde el pasado 28 de enero y hasta el 14 de febrero, y que lo ubican junto con otras entidades en semáforo epidemiológico color rojo debido al aumento de los contagios, hospitalización y defunciones por la covid-19, los partidos y aspirantes deben transformar la forma de hacer campañas.
El integrante del Grupo Parlamentario de Morena estimó que no sólo los aspirantes, sino también las autoridades electorales deben “innovar y simplificar los procedimientos de capacitación electoral e integración de casillas. Es momento de transformar la forma de hacer campañas electorales de volver a creer que lo imposible se convertirá en ordinario”.
Admitió que el semáforo rojo sólo permite las actividades económicas esenciales y las restricciones que conlleva “inciden en el desarrollo de los procesos electorales, puesto que condicionan la ejecución de diversos procedimientos como los actos de precampaña, campaña, la difusión de la propaganda electoral, la ubicación e integración de las casillas, la capacitación de los funcionarios, la distribución, la entrega de los materiales y los documentos electorales, la emisión, el escrutinio, la sumatoria de los votos en la casilla, la remisión de los paquetes electorales, y el cómputo final de los sufragios”.
Refirió que “los anteriores procedimientos requieren de la interacción, en el mejor de los casos, de dos personas (capacitación electoral, ubicación de casillas, entrega de paquetes electorales), de concurrencia, en un caso intermedio, de decenas de personas (emisión de la votación y cómputos de los sufragios), de conglomeración, en el peor de los casos, de cientos o miles de personas (actos de precampaña y campaña)”.
Consideró que “es imprescindible que las autoridades desarrollen un análisis sobre las condiciones de salubridad con la intención de definir la conveniencia de cómo llevar a cabo las elecciones, por lo que se tienen que reformar los marcos legales, modificar los procedimientos electorales y ampliar el presupuesto de las elecciones. Todo en aras de salvaguardar la vida de las personas en los procesos de formación de la voluntad colectiva”.
“Ante tal circunstancia, el objetivo de esta iniciativa es que los institutos políticos, las y los precandidatos o candidatos debidamente registrados, no realicen actos masivos, reuniones o realicen marchas en un contexto de pandemia, para no conglomerar a gente en actos de precampaña o campaña, ya que se tienen que cuidar los protocolos y a la población guerrerense en general”, dijo.