Más de 400 alumnos de la escuela Emperador Cuauhtemoc se encuentran en constante riesgo debido a un viejo árbol que el municipio se ha negado a podar debido a que lo impide la regidora Reynalda Pablo de la Cruz, quien tiene su casa frente a esta institución educativa y ha intervenido aunque el árbol se encuentra en la calle
María Eréndira Monroy Sanabria, quien funge como presidente del comité de padres de familia, denunció que han recurrido a todas las instancias gubernamentales para solicitar que se corte este árbol incluso a Protección Civil y tuvieron una reunión con la presidenta municipal Norma Otilia Hernández Martínez y no les permitió ni siquiera a completar un minuto de diálogo y solamente le respondía “rápido, díganme rápido, díganme rápido”.
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Además del árbol que por su tamaño y edad representa un riesgo para los alumnos, existe otro riesgo para los estudiantes que es una barda que se construyó entre el espacio educativo y una cancha deportiva que también es propiedad de la escuela, pero hace muchos años se ha utilizado de manera compartida con la colonia.
La denunciante insistió en que la cancha está dentro del terreno de la primaria y por ende es parte de su infraestructura que se tiene que respetar.
Más allá del tema de la propiedad de la cancha establecieron que la barda es una estructura improvisada que se ha inclinado por lo que es un riesgo latente para los menores que acuden diariamente a recibir educación en este lugar.
