Con una baja afluencia de visitantes en el Panteón Central de Chilpancingo, es como transcurre la festividad del Día de los Fieles Difuntos, donde la población conmemora a los muertos adultos.
A diferencia de otros años en que se registran aglomeraciones importantes, los pequeños pasillos del panteón no alcanzan el llenado.
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En el lugar familias completas arriban con flores, botes de agua, y comida, para degustar un platillo sobre las tumbas de sus seres queridos.
En un recorrido realizado por las instalaciones, se observa a músicos ejecutar algunas piezas musicales, mientras que otras familias hacen limpieza de tumbas y otras más rezan.
Personas se alquilan para acarrear agua en cubetas, y otros más para hacer la limpieza de tumbas.
Sobre las tumbas se colocan vasos de mezcal, refrescos y cerveza, para ofrecerlos a los difuntos.
Debido a la baja asistencia de visitantes, no se registran grandes filas de vehículos, sobre las calles aledañas.
