Ante la precaria situación que se sufre en los pocos inmuebles en donde operan los Servicios Médicos Forenses (SEMEFOS), organismos internacionales han tenido que intervenir en las tareas de identificación de 700 cuerpos que permanecían en calidad de desconocidos, para poder ser entregados a sus familiares y terminar con su incertidumbre, antes de ser enviados a la fosa común.
La ayuda ha sido vital, en virtud de que la falta de espacios y de cámaras frigoríficas, le impedía al personal forense mantener y conservar los cadáveres de las personas que pierden la vida diariamente, haciendo más difícil que sus deudos pudieran reclamarlos y que se desvaneciera toda posibilidad de ser identificados.
El secretario de Salud estatal, Carlos de la Peña Pintos, anunció una inversión federal de 35 millones de pesos para construir las nuevas instalaciones del Semefo en Acapulco, lo cual permitirían contar con mayor capacidad para la recepción de cadáveres en este 2020 y disponer del equipo para practicar los estudios morfológicos.
Sin embargo, no se ha concretado la construcción del nuevo Semefo en Acapulco, por lo que continua el traslado de cadáveres al Panteón Ministerial en la capital; la acumulación de cuerpos en Guerrero ha provocado la saturación de las cámaras frigoríficas que se encuentran en la entidad, cinco de ellas en Acapulco, tres en Chilpancingo y una en Iguala.
La Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) y la Cruz Roja Internacional, se sumaron a las labores de identificación de los 751 cuerpos que se encuentran bajo resguardo del Servicio Médico Forense (Semefo), del 2010 a 2017, cuyos trabajados al concluir permitió la identificación casi de la totalidad.
En el 2018, el gobierno del estado, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) y la Cruz Roja Internacional firmaron un convenio para lograr la identificación de los cadáveres que se encontraban almacenados en el Semefo de Guerrero, de los cuales 400 cuerpos ya habían sido procesados; en ese entonces se informó que la inversión era de 20 millones de pesos que aportarían, la mitad el gobierno del estado y la otra mitad la federación.
El convenio tenía un plazo máximo de un año, el cual fue rebasado, debido a que se les adeudaban salarios a peritos forenses que participaban en los estudios de identificación y que habían dejado de laborar, por lo que, en octubre del 2019, la Cruz Roja Internacional reanudó las labores de identificación de los 751 cadáveres almacenados en el anfiteatro.
El director estatal del Semefo en la entidad, Ben Yehuda Martínez Villa, informó que después de cuatro meses de intenso trabajo forense, el domingo 26 de enero del presente año, concluyeron los trabajos de identificación de los 751 cuerpos que están en el Semefo, efectuados por la Cruz Roja Internacional.
Anunció que, en febrero, el coordinador del proyecto forense de la Cruz Roja Internacional, rendirá su informe de las pruebas genéticas y de ADN de todos los cuerpos almacenados del 2010 hasta el 2017, en aras de poder entregarlos a sus parientes y poner fin a su búsqueda.
“Los resultados serán dados por el coordinador del proyecto a finales del mes de febrero de cuántos cuerpos se analizaron, cuántos cuerpos se mandaron al panteón forense, cuántos cuerpos se mandaron a la Osteoteca y cuantos cuerpos tienen todavía en resguardo en las cámaras frigoríficas y el número de los que fueron identificado”, indicó.
Asimismo, explicó que, el trabajo consistió en hacerle estudios a los 751 cadáveres de dactiloscopia, odontología forense, antropología forense, genética forense y medicina forense y que al final se le extrae una muestra para genética forense.
En entrevista, especificó qué de manera inicial había 751 carpetas de investigación con un supuesto número similar de cuerpos, sin identificar, cuando iniciaron el proyecto; el número se modificó al haber bolsas con ropa o partes de un mismo cuerpo.
Además, precisó que se tardaron en realizar los estudios antes citados por la antigüedad y tiempo debido a que eran más difíciles por su alta complejidad de hacer los trabajados, aunado a que carecían del equipo.
Agregó que conforme han sido estudiados los cuerpos, han sido identificados y entregados a sus familiares, aunado al estudio de los cuerpos, lograron capacitar a su personal, “es decir los odontólogos, peritos, médicos fueron capacitados durante los trabajos y ahora serán ellos quienes hagan los estudios”, agregó.
El funcionario estatal, destacó que Guerrero es pionero en todo el país del proyecto Forense para la identificación de cuerpos desconocidos en el cual participaron diversos especialistas de distintas áreas.
Señaló que el estado, es precursor en la construcción de un servicio médico forense y de un panteón estatal forense cuyos proyectos fueron apoyados por el gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores y que ya son replicados en otras entidades del país.
En abril del 2019, el Sol de Acapulco informó sobre la saturación de cuerpos en el Semefo y que en Guerrero se tenían más de 800 cadáveres a espera de ser reclamados; tras la violencia y la falta de recursos para las tomas de identificación, así como la acumulación de víctimas por la violencia, se han trasladado desde el 2018 más de 150 cuerpos al Panteón Forense ubicado en Chilpancingo.
Al menos el 80 por ciento fueron víctimas de la violencia, a balazos, otros decapitaos, desmembrados e incluso osamentas, en estado de descomposición y la mayoría cuentan con carpetas de investigación que inició el ministerio público.
Miles de desaparecidos
La desaparición de personas en el estado de Guerrero ha sido alarmante para muchos sectores de la población, debido a que las autoridades estiman una cifra oficial de más de 2 mil 900 casos desde el año 2007 a la fecha, sin embargo, las asociaciones de familiares de víctimas estiman que el número es mayor, ya que la mayoría de los casos no se denuncian por temor a represalias.
En declaraciones recientes, la presidenta de la asociación de Familias de Acapulco en Búsqueda de sus Desaparecidos, María Emma Mora Liberato, ha informado que el número de desapariciones supera los tres mil y la falta de apoyo para las localizaciones por parte de los anteriores gobiernos ha ocasionado que la mayoría queden impunes.
La activista asegura que el municipio y en especial el Parque Nacional El Veladero, está convertido en una gran fosa clandestina, ya que existen miles de cuerpos enterrados en colonias de alta marginación y ausencia de autoridad.
Durante las jornadas de búsqueda y localización ordenadas por la FGR y acompañadas por un colectivo de familiares de desaparecidos desarrollado en los últimos meses del año 2019 y a principios del 2020, se dio cuenta que en Acapulco existen muchos cuerpos de personas asesinadas sin siquiera ser encontrados por la autoridad, ya que, durante varias semanas de arduos trabajos, se logró dar con el paradero de restos óseos de más de 20 personas en colonias del puerto.