La conmemoración del 10 de mayo para doña Margarita lejos de significar la felicidad por el día de las madres, representa el día más doloroso del año, el abrazo y beso que recibió hace 5 años fue el último que le dio su hijo Alfonso Fonseca Leyva, quien desapareció el 18 de mayo del 2019.
Alfonso Fonseca contaba con 22 años se desempeñaba como ayudante de albañil en una obra que se localiza en la entrada de la colonia Eduardo Neri, fue un sábado cuando se fue a trabajar al final del día habría de cobrar su salario semanal y después de ello regresaba a su hogar, ese día lo estuvieron esperando hasta muy tarde y nunca llegó.
Lea también: Sin mi hijo no hay nada que celebrar: Madre buscadora
Amigos y familiares acudieron en los días siguientes a realizar búsquedas por toda la zona en colonias aledañas, a preguntar con los trabajadores de esa y otras obras que hay por el lugar, la búsqueda también se extendió a hospitales, Semefo y centros de reclusión, nunca encontraron ni un indicio que pudiera ayudar a dar con su paradero.
Cuatro días después en la Fiscalía General del Estado les aceptaron la denuncia correspondiente e iniciaron la carpeta de investigación sin embargo hasta este día no ha habido acciones que verdaderamente tuvieran la intención de localizar al joven Alfonso y por el contrario en reiteradas ocasiones en esa dependencia intentaron hacer que la mujer desistiera de la búsqueda.
Con llanto en los ojos y voz entrecortada doña Margarita Leyva Cruz insistió en que su hijo era muy apegado a la familia, que sus compañeros de trabajo incluso lo consideraban como una persona solitaria porque no tenía novia, no utilizaba redes sociales y no era afecto a irse a tomar al salir del trabajo como lo hacían otros de sus compañeros.
Él saliendo de trabajar regresaba a su casa saludaba a su madre comía se bañaba y descansaba, era la rutina de todos los días por lo que no advierten que tuviera enemigos que quisiera perjudicarlo.
Resaltó que hace aproximadamente tres años en la agencia del ministerio público le dijeron que su hijo se había ido a Estados Unidos a buscar fortuna y a conocer nuevas personas sin embargo no le dieron ningún elemento que pudiera corroborarlo les exigió que le presentaran evidencia de que él andaba por allá o cuando menos imágenes de las cámaras de la terminal del momento en que hubiera abordado el autobús pero jamás pudieron conseguir nada, de tal manera que eso evidencia solamente que la intención de las autoridades era hacerla desistir de buscar a su hijo pero a 5 años de la pérdida el dolor sigue siendo igual de intenso al recordar su memoria y por ello no dejará de buscarlo nunca.
“El 10 de mayo para mí es una fecha muy dolorosa recordar a mi hijo que en punto de las 8 de la mañana entraba a darme un abrazo y que me besaba y que me decía que me quería es el último recuerdo vivo que tengo de él porque lo hizo unos días antes de que se esfumara de que desapareciera y no dejara ningún indicio para buscarlo”.
Finalmente resaltó que en la agencia del ministerio público acudió a revisar el expediente para ver qué tanto pudo haberse avanzado y no encontró absolutamente nada más que la denuncia que ella puso hace 5 años y algunos oficios que giraron para solicitar que se hicieran que giraron pero absolutamente ningún acto de investigación ningún avance nada que pudiera ayudar a localizarlo.