El abogado de los padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, Vidulfo Rosales, sostuvo que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se encuentra cediendo a las presiones del Ejército Mexicano en el caso Ayotzinapa.
Mencionó que la renuncia de Omar Gómez Trejo, como titular de la Fiscalía Especial para el Caso Ayotzinapa, denota un retroceso y una lucha interna en el gobierno entre voces progresistas y la milicia.
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“Estamos llegando a una etapa difícil, estamos llegando a una etapa donde las señales son ominosas, son señales oscuras, son más bien señales de que vamos en retroceso”, dijo.
Expresó que primero se dieron las filtraciones de documentos, después la cancelación de órdenes de aprehensión contra militares y algunos funcionarios de gobierno como el ex procurador Iñaky Blanco y la ex magistrada Lambertina Galeana.
Enfatizó que desde hace una semana, cuando se supo de la cancelación de estas órdenes de aprehensión, se buscó respuestas con las autoridades, sin que hasta el momento se tenga información.
Aunado a eso suma la nueva posición del gobierno de desprestigiar a las organizaciones sociales y defensores de derechos humanos, a quienes señala de querer lucrar con el movimiento.
