Con el toque de silencio en memoria de los fallecidos por el huracán Otis y un llamado a la reflexión, la reconciliación y la renovación de proyectos, este lunes la gobernadora Evelyn Salgado Pineda encabezó la ceremonia de honores a la bandera en la plaza cívica Vicente Guerrero de la Sede del Poder Ejecutivo.
En la ceremonia cívica, la mandataria reconoció el trabajo incansable de los servidores públicos de los tres niveles de gobierno que de manera permanente han estado apoyando para atender la contingencia en los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez.
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“Esta es una ceremonia especial, corresponde a la época más importante para todas y todos, una época de esperanza, de ilusión, de reencuentro, reconciliación, amor, cariño para todos los hogares, porque la fiesta decembrina recuerda lo más hermoso que tenemos”.
Expresó que esta temporada es propicio para hacer una reflexión en torno a lo que hasta el momento se ha vivido en el año, “para muchos será de descanso, para otros habremos de seguir trabajando, pero lo importante es hacer esa reflexión que nos permite agradecer las experiencias vividas y todo el crecimiento de lo que tuvimos en el año”.
En el caso de Acapulco y Coyuca expresó hoy se viven momentos complicados pero la Navidad se convierte en un impulso para seguir adelante, porque Otis no logró terminar con los sueños de nuestros paisanos, “Destruyó edificios y patrimonios pero no pudo acabar con los sueños de nuestros pueblos, con ese espíritu indomable fuerza que tienen los acapulqueños y nuestros hermanos de Coyuca, con la esencia de ese maravilloso puerto que hoy está de pie y renace con la luz de un futuro brillante”.
En la ceremonia la gobernadora estuvo acompañada de mandos del Ejército y la Marina, así como de representantes de los tres poderes del estado y miembros de su gabinete.
Reiteró que se mantendrá trabajando en el puerto de Acapulco por el tiempo que sea necesario apoyando a quienes hoy sufrieron la desgracia de perder sus patrimonio, pero principalmente en estrecha relación con las familias que perdieron a un ser querido, porque más allá de su obligación como funcionaria pública esto lo hace con mucho amor, como lo están haciendo todos los trabajadores del estado que hoy están poniendo su esfuerzo para que Acapulco renazca aún con más brillo.
“Desearles a todos que tengan estas fiestas a lado de sus familias, que sean días de reflexión, de mucha unidad y reconciliación, que sean el inicio de una nueva oportunidad para todos”.