¿A dónde van los sin nombre?

Autoridades anunciaron en dos ocasiones la construcción de un nuevo Semefo en Acapulco, sin que se concrete la obra. Continúa el traslado de restos humanos al Panteón Ministerial con sede en Chilpancingo.

Carlos Moreno A. | Pedro Elías Radilla González

  · domingo 28 de abril de 2019

La acumulación de cadáveres en el Servicio Médico Forense (Semefo) en Guerrero, ha provocado la saturación de las cámaras frigoríficas por la falta de identificación y reclamación por parte de los deudos para inhumarlos, por lo que continúa el traslado de los restos humanos al panteón ministerial con sede en Chilpancingo.

La problemática ha orillado, en dos ocasiones, a los secretarios de Salud en turno a anunciar la construcción de unas nuevas instalaciones en Acapulco, sin embargo, en ambas, no se han dado a conocer los proyectos ni se ha contado con presupuesto para concretar la obra.

Tan sólo el pasado miércoles debido a esta saturación el Semefo en Acapulco envió 29 cuerpos al Panteón Estatal Forense en Chilpancingo, mismos que no han sido identificados por sus familiares, todos relacionados a homicidios y a temas de violencia o delincuencia organizada.

Desde la administración del ex gobernador Ángel Aguirre Rivero se comenzó a buscar un terreno para construir instalaciones nuevas del Semefo, así fue declarado en su momento por el entonces secretario de Salud, Lázaro Mazón Alonso, y hace unos días el actual titular de la dependencia, Carlos de la Peña Pintos, aseguró que están estudiando la posibilidad.

Cabe mencionar que el pasado 25 de enero de este año, otros 20 cadáveres se enviaron de Acapulco al panteón forense de Chilpancingo, en aquel momento además de la saturación de cuerpos se averiaron cinco cámaras frigoríficas, por lo que en total fueron más de 60 cadávereslos trasladados, sólo en el primer mes del 2019. La falta de identificación de cuerpos se viene arrastrando desde el año 2016 cuando repuntó en Guerrero y en particular en Acapulco la violencia, los homicidios, tanto que el 22 de abril del 2018 debido a la falta de espacio, 31 cuerpos no identificados por sus familiares se enviaron a Chilpancingo, los cuales eran provenientes de municipios como Coyuca de Benítez y San Marcos, así como de otros lugares de Costa Chica y Costa Grande.

En la actualidad, a cuatro meses de haber iniciado el año 2019, la saturación de cadáveres persiste, tan sólo en Acapulco son más de 300 los cuerpos que están bajo resguardo, de los cuales más de la mitad no han sido identificados, y en toda la entidad son más de 800 los restos que esperan ser reclamados.

Esta situación ha sido provocado, según los propios trabajadores del Semefo, por el aumento de los homicidios y la falta de recursos económicos para realizar los estudios de ADN para identificar algunos cadáveres que fueron quemados, decapitados o diluidos con ácido, lo que hace imposible su reconocimiento. Del total de cuerpos que se tienen actualmente en el Semefo de Acapulco, más del 80 por ciento murieron asesinados en diversos hechos delictivos y permanecen algunos desde el año 2015 a la fecha, revelaron los encargados de dichas instalaciones.

Asimismo, la fuente señaló que la mayoría de las víctimas murieron por disparos de arma de fuego, otros desmembrados o decapitados, se localizaron en estado de descomposición e incluso en osamentas, casos que son investigados por la Fiscalía del Estado a través de una carpeta iniciada en los ministerios públicos.

Este problema ha ocasionado que las autoridades de Salud hayan reconocido la saturación de cuerpos sin identificar, toda vez que en lo que va del 2019 se tienen en los tres principales municipios del estado; Acapulco, Iguala y Chilpancingo, 800 cadáveres almacenados, cuando la capacidad de las cámaras frigoríficas es de 270 muertos, es decir tienen un sobrecupo de 530.

Tan sólo en el Semefo de Acapulco existen cinco cámaras frigoríficas con capacidad para 150 cuerpos, en Chilpancingo tres con cupo de 80 cadáveres, y en Iguala se tiene una sola donde caben 30, incluso en la capital del estado se tienen restos humanos almacenados desde el año 2011.

Fuentes del Servicio Médico Forense consultados informaron que la acumulación de cuerpos es por el aumento de la violencia en el estado y el puerto, por ende, el trabajo de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado se retrasa en los exámenes de genética forense, de antropología y dactiloscopia.

El secretario de Salud en el estado, Carlos de la Peña Pintos, el pasado 01 de abril indicó que espera que en este 2019 puedan concluir el depósito de bóvedas mortuorias de 600 cuerpos y restos humanos que están en calidad de desconocidos en el Semefo; en ese entonces también aseguró que se le ha dado mantenimiento a las cámaras frigoríficas que albergan los cadáveres, los cuales no son reclamados.

Sin embargo, trabajadores de la dependencia revelaron que de los últimos mantenimientos que se habían dado a las cámaras frigoríficas, por ejemplo, en Acapulco, fue el pasado 4 de diciembre de 2017, luego de que averiaran cuatro aparatos.

El pasado miércoles 17 de abril, tras ser invitado a la sesión del grupo ACA en Acapulco, el titular de la Secretaría de Salud, Carlos de la Peña Pintos, informó que están buscando la posibilidad de construir un nuevo Semefo en el puerto y que, para ello, había autorizado poco más de 35 millones de pesos, sin embargo, consultado vía telefónica la semana pasada, señaló que aún no hay fecha para el inicio de la obra de forma oficial.