Las calles del primer cuadro de la ciudad se encuentran inundadas de miles de litros de aguas negras debido a los constantes brotes que salen de las alcantarillas de un drenaje que, desde hace varios años, se encuentra totalmente colapsado.
Comerciantes establecidos de las calles José María Iglesias, La Quebrada, La Paz y Adolfo López Mateos, se quejaron del problema que además de generar contaminación, también les representa afectaciones económicas debido a que han perdido clientes por los olores fétidos que expiden.
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Lamentaron que se tenga este problema de contaminación en las calles del centro de la ciudad cuando a escasos metros de distancia se encuentran las oficinas de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco, dependencia que tiene la responsabilidad de reparar fugas y drenajes colapsados.
“Es constante el escurrimiento de las aguas negras, no se puede ni caminar por las calles inundadas, pero el mayor riesgo de salud es para cientos de niños que acuden diariamente a dos escuelas primarias que se ubican en la calle La Quebrada, donde se registra el mayor escurrimiento de las aguas pestilentes, así como al Zócalo y la Catedral”, dijo la comerciante Esperanza Durán Estrada.
Señaló que como locatarios han buscado por medio de reportes telefónicos y a través de entrega de escritos en la oficina de la CAPAMA para que sea atendido el problema, sin embargo, no se tiene una respuesta favorable, por lo que se tiene que seguir con el sufrimiento que genera la contaminación en las calles del centro de Acapulco.
Duran Estrada, añadió que el escurrimiento de las aguas negras es constante, pero este aumenta de manera considerable en cada temporada de lluvias, sobre todo para alumnos, padres de familia y maestros que acuden a las escuelas “Ignacio Manuel Altamirano” y la “Manuel M. Acosta”, ambas ubicadas sobre la calle La Quebrada.